Iglesia Católica y las iglesias evangélicas intensificaron su rechazo a las reformas que se plantean en la educación sexual integral (ESI), por entender que avasallan su derecho a la libertad de enseñanza y obligan a dar contenidos sin considerar los valores y el ideario institucional.
En un comunicado, publicado ayer, la Alianza Cristiana de Iglesias Evangélicas de la República Argentina (Aciera) rechazó “el intento de obligar a las instituciones a enseñar lo que no concuerda con sus idearios, el intento totalitario de excluir a los padres a la hora de elegir la educación sexual de sus hijos y el intento de introducir, dentro de la educación sexual, contenidos sin base científica que responden a una construcción ideológica, sin contar con la participación de los padres y actores sociales en su elaboración”.
Para los evangélicos, la familia es “el agente natural y primario” de la educación y “las instituciones de educación de gestión privada tienen el derecho de aprobar el proyecto educativo institucional de acuerdo con su ideario y participar del planeamiento educativo”.
“La Iglesia debe resistir a que le impongan programas, textos, profesores que van a enseñar en materia de educación sexual lo contrario de la moral cristiana”, abundó Aguer, quien convocó a hacer planteos judiciales si prospera la reforma en la ESI. “Espero que tantos expertos en derecho constitucional ayuden a que muchas familias, tanto de la escuela estatal como de la de gestión privada, presenten ante los Tribunales correspondientes, acciones de inconstitucionalidad contra leyes inicuas”
Respuesta:
ésto es lo que encontré
Iglesia Católica y las iglesias evangélicas intensificaron su rechazo a las reformas que se plantean en la educación sexual integral (ESI), por entender que avasallan su derecho a la libertad de enseñanza y obligan a dar contenidos sin considerar los valores y el ideario institucional.
En un comunicado, publicado ayer, la Alianza Cristiana de Iglesias Evangélicas de la República Argentina (Aciera) rechazó “el intento de obligar a las instituciones a enseñar lo que no concuerda con sus idearios, el intento totalitario de excluir a los padres a la hora de elegir la educación sexual de sus hijos y el intento de introducir, dentro de la educación sexual, contenidos sin base científica que responden a una construcción ideológica, sin contar con la participación de los padres y actores sociales en su elaboración”.
Para los evangélicos, la familia es “el agente natural y primario” de la educación y “las instituciones de educación de gestión privada tienen el derecho de aprobar el proyecto educativo institucional de acuerdo con su ideario y participar del planeamiento educativo”.
“La Iglesia debe resistir a que le impongan programas, textos, profesores que van a enseñar en materia de educación sexual lo contrario de la moral cristiana”, abundó Aguer, quien convocó a hacer planteos judiciales si prospera la reforma en la ESI. “Espero que tantos expertos en derecho constitucional ayuden a que muchas familias, tanto de la escuela estatal como de la de gestión privada, presenten ante los Tribunales correspondientes, acciones de inconstitucionalidad contra leyes inicuas”
espero que te sirva