Este tipo de nexos introducen la proposición subordinada que expresa causa o razón de lo dicho en la oración. Funcionan como conjunciones causales las siguientes: porque, pues, ya que, puesto que, en vista que y a causa de que. A continuación algunos ejemplos de su uso:
El edifico no es original, puesto que es una imitación de un famoso rascacielos neoyorquino.
Saldremos el próximo fin de semana, porque nos hace falta distracción.
No participará en el proceso de selección, pues conoce sus limitaciones.
Ya que no vienes, iré yo.
Suspenderemos la expedición en invierno, en vista de que se corren muchos riesgos.
La preposición “por” también puede cumplir esta función, por ejemplo: Está castigado por desobediente. La misma situación acontece con el adverbio “como”, por ejemplo: Como nadie me avisó, no fui a la reunión.
Este tipo de nexos introducen la proposición subordinada que expresa causa o razón de lo dicho en la oración. Funcionan como conjunciones causales las siguientes: porque, pues, ya que, puesto que, en vista que y a causa de que. A continuación algunos ejemplos de su uso:
El edifico no es original, puesto que es una imitación de un famoso rascacielos neoyorquino.
Saldremos el próximo fin de semana, porque nos hace falta distracción.
No participará en el proceso de selección, pues conoce sus limitaciones.
Ya que no vienes, iré yo.
Suspenderemos la expedición en invierno, en vista de que se corren muchos riesgos.
La preposición “por” también puede cumplir esta función, por ejemplo: Está castigado por desobediente. La misma situación acontece con el adverbio “como”, por ejemplo: Como nadie me avisó, no fui a la reunión.