Se considera a Italia la cuna de la pintura renacentista al confluir allí las nuevas técnicas (como el descubrimiento de la perspectiva) con una nueva ideología humanista. Allí se conservaban a la vista los monumentos de la Antigüedad a la que se quería hacer renacer, buscando modelos de armonía y belleza.1
Se fue perfeccionando a lo largo del siglo XV en las ciudades estado italianas, comenzando por Florencia, bajo el mecenazgo de losMédici. El papel de defensores de las artes que rivalizaban entre sí por dar más brillo a sus estados, fue desempeñado por losMontefeltro en Urbino, los Sforza y los Visconti en Milán, los Gonzaga en Mantua y los Este en Ferrara. En Roma fueron los papasquienes llamaron a los distintos artistas de la época para trabajar en los palacios papales.2
Se considera a Italia la cuna de la pintura renacentista al confluir allí las nuevas técnicas (como el descubrimiento de la perspectiva) con una nueva ideología humanista. Allí se conservaban a la vista los monumentos de la Antigüedad a la que se quería hacer renacer, buscando modelos de armonía y belleza.1
Se fue perfeccionando a lo largo del siglo XV en las ciudades estado italianas, comenzando por Florencia, bajo el mecenazgo de losMédici. El papel de defensores de las artes que rivalizaban entre sí por dar más brillo a sus estados, fue desempeñado por losMontefeltro en Urbino, los Sforza y los Visconti en Milán, los Gonzaga en Mantua y los Este en Ferrara. En Roma fueron los papasquienes llamaron a los distintos artistas de la época para trabajar en los palacios papales.2