En agosto y septiembre de 2020 se identificó en Jutlandia del Norte (Dinamarca) una variante del SARS-CoV-2 que se o transmitía entre visones de granja y, posteriormente, al ser humano. Esta variante, denominada «cluster 5» por las autoridades danesas, presenta una combinación de mutaciones inédita. En los estudios preliminares realizados en ese país se ha expresado preocupación por la posibilidad de que la neutralización del virus se va afectada en los seres humanos, lo cual limitaría el alcance y la duración de la protección inmunológica tras la infección natural o la vacunación. Se está investigando la neutralización de esta variante en el ser humano. Tras las extensas actividades de investigación y vigilancia efectuadas hasta la fecha, las autoridades danesas han registrado solo 12 casos humanos de la variante «cluster 5» que se remontan a septiembre de 2020, y la propagación de esta variante parece limitada.
El 14 de diciembre de 2020, las autoridades del Reino Unido notificaron a la OMS una variante, que designaron como SARS-CoV-2 VOC 202012/01 (por las siglas en inglés de «variante en investigación, año 2020, mes 12, variante 01»), con 23 sustituciones de nucleótidos y no relacionada filogenéticamente con el SARS-CoV-2 que circulaba en el país en el momento en que fue detectada. No se conocen con claridad ni la fuente ni el modo en que surgió inicialmente. El SARS-CoV-2 VOC 202012/01 se detectó por primera vez en el sudeste de Inglaterra, pero en pocas semanas fue desplazando gradualmente a otros linajes del virus en esa zona y en Londres. El 26 de diciembre de 2020, esta variante se encontró tras un muestreo sistemático y un análisis genómico efectuado en todo el país. De acuerdo con los primeros resultados de los estudios epidemiológicos, de modelización, filogenéticos y clínicos, la transmisibilidad del SARS-CoV-2 VOC 202012/01 es más alta que la del virus original, pero esta variante no es más virulenta (de acuerdo con la duración de la hospitalización y la tasa de letalidad a los 28 días) y la tasa de reinfección no es mayor que la de otras variantes del SARS-CoV-2 que circulan en el Reino Unido.1 Por otra parte, se ha demostrado que la deleción en las posiciones 69/70, otra mutación presente en la variante VOC 202012/01, afecta a la sensibilidad de algunas pruebas PCR diagnósticas que utilizan como diana en el gen de la proteína S. No obstante, la mayoría de las PCR empleadas en el mundo utilizan varias dianas y, por lo tanto, no se prevén efectos significativos en la capacidad para diagnosticar a infección. De acuerdo con las evaluaciones realizadas en laboratorios, el rendimiento de los inmunoensayos de flujo lateral para detectar antígenos del SARS-CoV-2 no se ve afectado significativamente. Al 30 de diciembre, otros 31 países, territorios o zonas de cinco de las seis regiones de la OMS habían notificado la variante VOC 202012/01.
El 18 de diciembre, las autoridades sudafricanas anunciaron que habían detectado una nueva variante del SARS-CoV-2 que se está propagando rápidamente en tres provincias del país. Sudáfrica ha denominado a esta variante 501Y.V2 porque el virus presenta la mutación N501Y. Aunque la variante VOC 202012/01 también presenta esta misma mutación, los análisis filogenéticos indican que la variante sudafricana no es la misma que la británica. Durante la semana del 16 de noviembre, la secuenciación sistemática llevada a cabo por las autoridades sanitarias sudafricanas reveló que esta nueva variante ha sustituido en gran medida a los demás virus SARS-CoV-2 que circulan en las provincias de Eastern Cape, Western Cape y KwaZulu-Natal. Aunque los datos genómicos demuestran que la variante 501Y.V2 ha desplazado rápidamente a los demás linajes que circulan en ese país y los estudios preliminares apuntan a que está asociada con una mayor carga vírica —lo que hace pensar que tiene más capacidad para transmitirse—, se continúan estudiando estos y otros factores que puedan afectar a esa capacidad. Además, por el momento no se ha demostrado con claridad que esta nueva variante ocasione síntomas más graves o resultados más adversos, y es preciso seguir investigando para conocer sus efectos en la transmisión, la gravedad clínica de la infección, el diagnóstico en el laboratorio, los tratamientos, las vacunas y las medidas preventivas de salud pública que se apliquen. Al 30 de diciembre, otros cuatro países habían notificado la variante 501Y.V2 sudafricana.
En agosto y septiembre de 2020 se identificó en Jutlandia del Norte (Dinamarca) una variante del SARS-CoV-2 que se o transmitía entre visones de granja y, posteriormente, al ser humano. Esta variante, denominada «cluster 5» por las autoridades danesas, presenta una combinación de mutaciones inédita. En los estudios preliminares realizados en ese país se ha expresado preocupación por la posibilidad de que la neutralización del virus se va afectada en los seres humanos, lo cual limitaría el alcance y la duración de la protección inmunológica tras la infección natural o la vacunación. Se está investigando la neutralización de esta variante en el ser humano. Tras las extensas actividades de investigación y vigilancia efectuadas hasta la fecha, las autoridades danesas han registrado solo 12 casos humanos de la variante «cluster 5» que se remontan a septiembre de 2020, y la propagación de esta variante parece limitada.
El 14 de diciembre de 2020, las autoridades del Reino Unido notificaron a la OMS una variante, que designaron como SARS-CoV-2 VOC 202012/01 (por las siglas en inglés de «variante en investigación, año 2020, mes 12, variante 01»), con 23 sustituciones de nucleótidos y no relacionada filogenéticamente con el SARS-CoV-2 que circulaba en el país en el momento en que fue detectada. No se conocen con claridad ni la fuente ni el modo en que surgió inicialmente. El SARS-CoV-2 VOC 202012/01 se detectó por primera vez en el sudeste de Inglaterra, pero en pocas semanas fue desplazando gradualmente a otros linajes del virus en esa zona y en Londres. El 26 de diciembre de 2020, esta variante se encontró tras un muestreo sistemático y un análisis genómico efectuado en todo el país. De acuerdo con los primeros resultados de los estudios epidemiológicos, de modelización, filogenéticos y clínicos, la transmisibilidad del SARS-CoV-2 VOC 202012/01 es más alta que la del virus original, pero esta variante no es más virulenta (de acuerdo con la duración de la hospitalización y la tasa de letalidad a los 28 días) y la tasa de reinfección no es mayor que la de otras variantes del SARS-CoV-2 que circulan en el Reino Unido.1 Por otra parte, se ha demostrado que la deleción en las posiciones 69/70, otra mutación presente en la variante VOC 202012/01, afecta a la sensibilidad de algunas pruebas PCR diagnósticas que utilizan como diana en el gen de la proteína S. No obstante, la mayoría de las PCR empleadas en el mundo utilizan varias dianas y, por lo tanto, no se prevén efectos significativos en la capacidad para diagnosticar a infección. De acuerdo con las evaluaciones realizadas en laboratorios, el rendimiento de los inmunoensayos de flujo lateral para detectar antígenos del SARS-CoV-2 no se ve afectado significativamente. Al 30 de diciembre, otros 31 países, territorios o zonas de cinco de las seis regiones de la OMS habían notificado la variante VOC 202012/01.
El 18 de diciembre, las autoridades sudafricanas anunciaron que habían detectado una nueva variante del SARS-CoV-2 que se está propagando rápidamente en tres provincias del país. Sudáfrica ha denominado a esta variante 501Y.V2 porque el virus presenta la mutación N501Y. Aunque la variante VOC 202012/01 también presenta esta misma mutación, los análisis filogenéticos indican que la variante sudafricana no es la misma que la británica. Durante la semana del 16 de noviembre, la secuenciación sistemática llevada a cabo por las autoridades sanitarias sudafricanas reveló que esta nueva variante ha sustituido en gran medida a los demás virus SARS-CoV-2 que circulan en las provincias de Eastern Cape, Western Cape y KwaZulu-Natal. Aunque los datos genómicos demuestran que la variante 501Y.V2 ha desplazado rápidamente a los demás linajes que circulan en ese país y los estudios preliminares apuntan a que está asociada con una mayor carga vírica —lo que hace pensar que tiene más capacidad para transmitirse—, se continúan estudiando estos y otros factores que puedan afectar a esa capacidad. Además, por el momento no se ha demostrado con claridad que esta nueva variante ocasione síntomas más graves o resultados más adversos, y es preciso seguir investigando para conocer sus efectos en la transmisión, la gravedad clínica de la infección, el diagnóstico en el laboratorio, los tratamientos, las vacunas y las medidas preventivas de salud pública que se apliquen. Al 30 de diciembre, otros cuatro países habían notificado la variante 501Y.V2 sudafricana.
Respuesta:
La variante brasileña y británica.
Explicación: