carocaTodos los huesos externamente presentan una estructura dura y compacta sin embargo el interior de los huesos es liviano y esponjoso.Los huesos están compuestos básicamente de calcio fósforo y una sustancia esponjosa llamada colágeno.Al conjunto de todos los huesos que tiene el cuerpo se le llama esqueleto. El esqueleto funciona como una armazón para mantener erguido el cuerpo, y como una caparazón para proteger los órganos. Busca un esqueleto en una enciclopedia y trata de ver cuáles son los huesos que sirven para dar movimiento al cuerpo y cuáles están para proteger los órganos más vulnerables.Pero es bueno saber que los huesos por sí solos no pueden hacer nada. Los huesos se mueven porque las articulaciones y los músculos le dan movimiento.Los huesos se comienzan a formar desde el vientre de la madre, donde crecen y se desarrollan. En el momento del nacimiento, los huesos del bebé son blandos y son como cartílagos. A medida que va pasando el tiempo, año tras año, los huesos van endureciendo y creciendo. Alrededor de los veinte años, los huesos han endurecido y el esqueleto se ha transformado en un verdadero soporte del cuerpo que nos mantiene erguidos.
El hueso es un tejido firme, duro y resistente que forma parte del endoesqueleto de los vertebrados. Está compuesto por tejidos duros y blandos. El principal tejido duro es el tejido óseo, un tipo especializado de tejido conectivo constituido por células (osteocitos) y componentes extracelulares calcificados. Los huesos poseen una cubierta superficial de tejido conectivo fibroso llamado periostio y en sus superficies articulares están cubiertos por tejido conectivo cartilaginoso. Los componentes blandos incluyen a los tejidos conectivos mieloide tejido hematopoyético y adiposo (grasa) la médula ósea. El hueso también cuenta con vasos y nervios que, respectivamente irrigan e inervan su estructura.
Los huesos poseen formas muy variadas y cumplen varias funciones. Con una estructura interna compleja pero muy funcional que determina su morfología, los huesos son livianos aunque muy resistentes y duros.
Alrededor de los veinte años, los huesos han endurecido y el esqueleto se ha transformado en un verdadero soporte del cuerpo que nos mantiene erguidos.
El hueso es un tejido firme, duro y resistente que forma parte del endoesqueleto de los vertebrados. Está compuesto por tejidos duros y blandos. El principal tejido duro es el tejido óseo, un tipo especializado de tejido conectivo constituido por células (osteocitos) y componentes extracelulares calcificados. Los huesos poseen una cubierta superficial de tejido conectivo fibroso llamado periostio y en sus superficies articulares están cubiertos por tejido conectivo cartilaginoso. Los componentes blandos incluyen a los tejidos conectivos mieloide tejido hematopoyético y adiposo (grasa) la médula ósea. El hueso también cuenta con vasos y nervios que, respectivamente irrigan e inervan su estructura.
Los huesos poseen formas muy variadas y cumplen varias funciones. Con una estructura interna compleja pero muy funcional que determina su morfología, los huesos son livianos aunque muy resistentes y duros.