Los ríos tropicales han jugado siempre un papel esencial en la ecología de los bosques lluviosos, pero también han sido importantes en las vidas de los habitantes y forasteros del bosque. Antes de la llegada de los europeos, las civilizaciones dispersas y las sociedades pequeñas se asentaron a lo largo de los cuerpos de agua, que les servían como medio de transporte y comunicación, de ruta para el comercio y como una fuente de pescado y agua dulce. Sin embargo, estos asentamientos fueron los primeros en desaparecer, ya que se vieron afectados directamente por la guerra, o indirectamente por el impacto de las enfermedades europeas.
En la actualidad, los grandes ríos tropicales siguen siendo una forma importante de infraestructura, ya que proveen un medio barato, confiable y fácil de transporte y comunicación. Los principales ríos portuarios como Iquitos (Perú) y Manaus (Brasil) son zonas comerciales, en donde los productos forestales son intercambiados por bienes provenientes de otros sitios. Normalmente, el único acceso a estos puertos aislados por el bosque circundante es por agua o por aire. Por ejemplo, no existen caminos que conduzcan a Iquitos, por lo que todos los materiales de construcción, automóviles y otros productos deben de ser enviados a la ciudad por agua o por aire.
Además de ser un medio de comercio y comunicación, los ríos tropicales son una fuente clave de proteína (pescado) para la población. Sin embargo, en algunas áreas los pescadores reportan menores capturas, ya que la sobrepesca regional cobra peaje. El río también provee servicios para los habitantes de las ciudades, ya que fertiliza los suelos circundantes durante la época de inundación, y se lleva las toneladas de desperdicios humanos y contaminantes que la gente arroja al río.
Los peces tropicales son una fuente importante de ingresos para muchos ciudadanos, especialmente en el Amazonas, que es hogar de alrededor de 3,000 especies de peces. Muchos de los peces que existen en los acuarios de las zonas templadas son importados de Brasil y Perú.
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si
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Los ríos tropicales han jugado siempre un papel esencial en la ecología de los bosques lluviosos, pero también han sido importantes en las vidas de los habitantes y forasteros del bosque. Antes de la llegada de los europeos, las civilizaciones dispersas y las sociedades pequeñas se asentaron a lo largo de los cuerpos de agua, que les servían como medio de transporte y comunicación, de ruta para el comercio y como una fuente de pescado y agua dulce. Sin embargo, estos asentamientos fueron los primeros en desaparecer, ya que se vieron afectados directamente por la guerra, o indirectamente por el impacto de las enfermedades europeas.
En la actualidad, los grandes ríos tropicales siguen siendo una forma importante de infraestructura, ya que proveen un medio barato, confiable y fácil de transporte y comunicación. Los principales ríos portuarios como Iquitos (Perú) y Manaus (Brasil) son zonas comerciales, en donde los productos forestales son intercambiados por bienes provenientes de otros sitios. Normalmente, el único acceso a estos puertos aislados por el bosque circundante es por agua o por aire. Por ejemplo, no existen caminos que conduzcan a Iquitos, por lo que todos los materiales de construcción, automóviles y otros productos deben de ser enviados a la ciudad por agua o por aire.
Además de ser un medio de comercio y comunicación, los ríos tropicales son una fuente clave de proteína (pescado) para la población. Sin embargo, en algunas áreas los pescadores reportan menores capturas, ya que la sobrepesca regional cobra peaje. El río también provee servicios para los habitantes de las ciudades, ya que fertiliza los suelos circundantes durante la época de inundación, y se lleva las toneladas de desperdicios humanos y contaminantes que la gente arroja al río.
Los peces tropicales son una fuente importante de ingresos para muchos ciudadanos, especialmente en el Amazonas, que es hogar de alrededor de 3,000 especies de peces. Muchos de los peces que existen en los acuarios de las zonas templadas son importados de Brasil y Perú.