María Reiche es lo que ha descubrió las líneas de Nazca para que sea en una legado cultural y también que ha sido víctima de cáncer en el final maria reiche
María Reiche nunca cesó en su investigación. Se mudó a una choza cercana a la zona para estar lo más cerca posible de su pasión, y jamás cesó en su empeño. Al principio, los lugareños desconfiaban de ella, llamándola “bruja” al verla caminar por la arena limpiando algunos tramos, medir y realizar cálculos constantemente. Más tarde, la bautizaron como “la mujer que barría el desierto”, y hoy es conocida como la Dama de Nasca, por su labor de investigación, protección y conservación de las líneas cuando el turismo y las visitas se convirtieron en un riesgo para mantener aquella maravilla.
A lo largo de su trabajo, descubrió que muchas de las figuras y líneas dibujadas tenían relación con el calendario astronómico, concluyendo que hacían referencia a ciclos como el solsticio de verano, así como los cambios climáticos para planificar las cosechas. Entre las figuras destacaban formas de animales, como un mono, que según ella representaba la Osa Mayor, grullas, colibríes o flamencos. Sobre este último, por ejemplo, la investigadora afirmaba que, si alguien se colocaba en su cabeza en las mañanas del 20 al 23 de junio y seguía con la mirada la dirección del pico, podría observar la salida del sol tras uno de los cerros del paisaje.
Explicación:
María Reiche falleció el 8 de junio de 1998 en Lima y fue enterrada en Nazca, siempre cerca de las líneas que la enamoraron tiempo atrás. La matemática alemana dijo una vez: “Tengo definida mi vida hasta el último minuto. El tiempo será poco para estudiar la maravilla que encierran las pampas de Nasca, y ahí moriré”. Y así lo hizo.
Respuesta:
María Reiche es lo que ha descubrió las líneas de Nazca para que sea en una legado cultural y también que ha sido víctima de cáncer en el final maria reiche
Respuesta:
María Reiche nunca cesó en su investigación. Se mudó a una choza cercana a la zona para estar lo más cerca posible de su pasión, y jamás cesó en su empeño. Al principio, los lugareños desconfiaban de ella, llamándola “bruja” al verla caminar por la arena limpiando algunos tramos, medir y realizar cálculos constantemente. Más tarde, la bautizaron como “la mujer que barría el desierto”, y hoy es conocida como la Dama de Nasca, por su labor de investigación, protección y conservación de las líneas cuando el turismo y las visitas se convirtieron en un riesgo para mantener aquella maravilla.
A lo largo de su trabajo, descubrió que muchas de las figuras y líneas dibujadas tenían relación con el calendario astronómico, concluyendo que hacían referencia a ciclos como el solsticio de verano, así como los cambios climáticos para planificar las cosechas. Entre las figuras destacaban formas de animales, como un mono, que según ella representaba la Osa Mayor, grullas, colibríes o flamencos. Sobre este último, por ejemplo, la investigadora afirmaba que, si alguien se colocaba en su cabeza en las mañanas del 20 al 23 de junio y seguía con la mirada la dirección del pico, podría observar la salida del sol tras uno de los cerros del paisaje.
Explicación:
María Reiche falleció el 8 de junio de 1998 en Lima y fue enterrada en Nazca, siempre cerca de las líneas que la enamoraron tiempo atrás. La matemática alemana dijo una vez: “Tengo definida mi vida hasta el último minuto. El tiempo será poco para estudiar la maravilla que encierran las pampas de Nasca, y ahí moriré”. Y así lo hizo.