En un municipio se efectúa la celebración anual del “Día del tomate”. Este día las personas se reúnen en la plaza central de la cabecera municipal con canastas llenas de tomates e inician una “batalla campal” en la que se arrojan tomates los unos a los otros hasta quedar totalmente llenos de tomate. Un sector de la población está en contra de esta práctica porque consideran que en el municipio y sus alrededores existen personas muy pobres que en ocasiones no poseen los recursos para alimentarse y el desperdiciar los alimentos de esa manera pone en evidencia la indiferencia social e incrementa la desigualdad. Otro sector de la población considera que esta práctica no tiene nada de malo y al contrario logra exponer las tradiciones y costumbres, logrando fortalecer la identidad de su pueblo y la fraternidad entre sus habitantes.
Si en esta situación, las autoridades del municipio decidieran respaldar la postura del sector de la población que se encuentra a favor de la celebración, en términos sociales habría un
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pd: ya hay papel de baño