Los protistas son organismos unicelulares eucariotas. Poseen células complejas con citoesqueleto, y organelos que cumplen funciones especificas. Las sustancias que requieren estos organismos para realizar sus funciones y las que producen, entran y salen de la célula a través de difusión simple y facilitada y transporte activo.
Aunque los hongos utilizan la mayoría de procesos de transporte y circulación de sustancias que usan los protistas, tiene otros que se relacionan con sus estructuras.
Son organismos heterótrofos y deben incorporar sus nutrientes desde el exterior. Lo hacen a través de enzimas que secretan por sus hifas, las cuales descomponen los alimentos y los convierten en sustancias que pueden incorporarse nuevamente a través de las membranas de las hifas.
Las hifas son estructuras en forma de hilo que forman el cuerpo de los hongos, conocido como micelio. Las células que las forman pueden estar parcialmente separadas por unas estructuras llamadas septos, o presentarse como un conglomerado de núcleos, en cuyo caso se dice que son no septadas.
Las hifas son importantes para el ingreso de sustancias al hongo y su distribución dentro del micelio. En las hifas septadas, el ingreso de sustancias y su circulación interna ocurren por la presencia de unas estructuras con forma de esponja en las paredes y en los tabiques, llamadas coscinoides.
Los coscinoides tienen una función conductora y cuentan con numerosos poros. Como los septos no se cierran por completo, las sustancias también circulan a través de los espacios que quedan entre ellos. En las hifas no septadas, las sustancias circulan libremente al interior de la hifa disueltas en el citoplasma.
Aunque no pueden ser considerados como verdaderos tejidos, algunos especialistas proponen que las hifas forman tres tipos de tejidos: él fundamental, el conectivo y el conductor.
En los hongos parásitos y simbiontes existen unas estructuras que penetran a manera de raíces en los tejidos de los organismos que están siendo invadidos, lo cual ayuda a la absorción de nutrientes por parte de los hongos.
Las bacterias son organismos unicelulares procariotas. En ellos, los procesos de circulación de sustancias ocurren a través de difusión facilitada y transporte activo y se dan por la acción de proteínas integrales de la membrana, que actúan como transportadores de las sustancia a través de la membrana celular.
Los protistas son organismos unicelulares eucariotas. Poseen células complejas con citoesqueleto, y organelos que cumplen funciones especificas. Las sustancias que requieren estos organismos para realizar sus funciones y las que producen, entran y salen de la célula a través de difusión simple y facilitada y transporte activo.
Aunque los hongos utilizan la mayoría de procesos de transporte y circulación de sustancias que usan los protistas, tiene otros que se relacionan con sus estructuras.
Son organismos heterótrofos y deben incorporar sus nutrientes desde el exterior. Lo hacen a través de enzimas que secretan por sus hifas, las cuales descomponen los alimentos y los convierten en sustancias que pueden incorporarse nuevamente a través de las membranas de las hifas.
Las hifas son estructuras en forma de hilo que forman el cuerpo de los hongos, conocido como micelio. Las células que las forman pueden estar parcialmente separadas por unas estructuras llamadas septos, o presentarse como un conglomerado de núcleos, en cuyo caso se dice que son no septadas.
Las hifas son importantes para el ingreso de sustancias al hongo y su distribución dentro del micelio. En las hifas septadas, el ingreso de sustancias y su circulación interna ocurren por la presencia de unas estructuras con forma de esponja en las paredes y en los tabiques, llamadas coscinoides.
Los coscinoides tienen una función conductora y cuentan con numerosos poros. Como los septos no se cierran por completo, las sustancias también circulan a través de los espacios que quedan entre ellos. En las hifas no septadas, las sustancias circulan libremente al interior de la hifa disueltas en el citoplasma.
Aunque no pueden ser considerados como verdaderos tejidos, algunos especialistas proponen que las hifas forman tres tipos de tejidos: él fundamental, el conectivo y el conductor.
En los hongos parásitos y simbiontes existen unas estructuras que penetran a manera de raíces en los tejidos de los organismos que están siendo invadidos, lo cual ayuda a la absorción de nutrientes por parte de los hongos.
Las bacterias son organismos unicelulares procariotas. En ellos, los procesos de circulación de sustancias ocurren a través de difusión facilitada y transporte activo y se dan por la acción de proteínas integrales de la membrana, que actúan como transportadores de las sustancia a través de la membrana celular.