El curaca en la organización inca y el Virreinato
El aillu tradicional, núcleo fundamental de la sociedad andina, integra con otros aillus las llamadas etnias; estas, al ser incorporadas por la conquista, dan lugar al Estado incaico, cuyo funcionamiento requiere de un aparato político, administrativo y militar. Piezas fundamentales del sistema son los curacas, jefes locales que funcionan como nexos de articulación entre el aillu y el Estado. Generalmente el curaca es el jefe de una familia muy extensa, quien, basado siempre en el principio de reciprocidad, retribuye las prestaciones recibidas por su numerosa parentela cumpliendo distintas funciones y muchas veces simbólicas, como asegurar la paz interna, organizar los ritos religiosos, velar por la redistribución de los productos a los huérfanos (waqcha), a los que no tienen familia en la comunidad, etc. La importancia del curaca en la organización económica del imperio radica en su capacidad de movilizar a la población para los trabajos requeridos por el Estado. Esta situación es violentamente alterada por la Conquista. La arquitectura del sistema económico, político y religioso se viene abajo y quedan solo fragmentos que insertados en nuevos contextos superviven hasta la actualidad. Con la desaparición del Estado incaico, la redistribución estatal es eliminada, la reciprocidad es sustituida por LA EXPLOTACIÓN COLONIAL DEL INDIO Y EL PRINCIPIO DE LA COMPLEMENTACIÓN VERTICAL DE LA ECONOMÍA ANDINA ES IGNORADO.
Se opera así la desestructuración social y económica del Estado incaico, acelerada por la introducción de la moneda y del mercado, y las incursiones de los comerciantes españoles. La organización colonial, al igual que la incaica, depende del curaca para explotar al indígena. El curaca encargado de proporcionar listas para los trabajos de mita o para el pago del tributo se aprovecha de esta situación y obtiene así un poder, antes desconocido, que utiliza estableciendo relaciones de clientela con los indios que quieren evitar los trabajos en las minas o el pago del tributo. A cambio de la exención de estos servicios, el curaca se beneficia de las prestaciones exclusivas y personales de los indios favorecidos. En estos intercambios el curaca falsea la antigua noción de reciprocidad para constituir una vasta clientela personal, que incide profundamente en los vínculos comunitarios y en el sistema de reciprocidad tradicional. Así, la conquista española impone un nuevo sistema económico y social, en el cual los antiguos principios de reciprocidad y redistribución pierden sentido.
RESPONDO:
¿Cambio la SITUACIÓN DEL INDÍGENA ?
COMPLETA :Señala diferencias.
Con base en el texto leído podemos afirmar que la situación del curaca durante la vigencia del Tahuantinsuyo y la llegada de los españoles sufrió severos cambios que consistieron en:
Función del curaca durante el Tahuantinsuyo:
Función del curaca después de la colonización:
Como consecuencia de esta labor, el curaca se aprovecha de su función y crea una clientela que accedería a realizarle favores exclusivos a cambio de excluirlos de las listas entregadas a los españoles.