La evolución de la medicina se funda precisamente en que a partir del uso de antibióticos para virus o bacterias se logra matar algunas de ellas, pero las que sobreviven se vuelven más resistentes.
El pelaje blanco de los animales del ártico, que les permite ocultarse en la nieve.
El camuflaje de los saltamontes, que los hace parecer hojas.
Los movimientos del alcatraz de pata azul macho, para atraer a su pareja.
Las jirafas, de las que sobrevivieron las de cuello más largo.
El cambio de color de un camaleón cuando tiene una presa, o para protegerse.
El proceso de clonación, constantemente en desarrollo pero ya probado en los hechos, potencialmente podría interferir con la selección natural.
Los escarabajos de color marrón tienen mayor posibilidad de supervivencia, y tiene más descendientes volviéndose frecuente la población.
El caso de la totalidad de las especies que fueron desapareciendo, y que aún lo siguen haciendo.
Las chitas, de las que han sobrevivido las más rápidas.
La evolución del ser humano en diferentes especies, denominados homínidos.
La deformación de la mandíbula de la serpiente para tragar una presa más grande.
El cambio de coloración de algunas polillas, motivado por la revolución industrial en Inglaterra. (Aquí el cambio en el medio ambiente fue generado por el hombre)
La danza de meneo de las abejas.
La resistencia a los insecticidas de algunos insectos, que evidencian la cuestión de la selección como fuente de supervivencia.
La forma del pico de los pinzones se modificó a lo largo del tiempo, pues tras las sequías se endurecieron permitiendo comer semillas más duras.
La capacidad de los seres humanos de aprender a hablar.
Las orquídeas que son capaces de engañar a las avispas para que se ‘apareen’ con ellas.
Las serpientes rey no venenosas, que se mimetizan con las víboras de coral venenosas.
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La evolución de la medicina se funda precisamente en que a partir del uso de antibióticos para virus o bacterias se logra matar algunas de ellas, pero las que sobreviven se vuelven más resistentes.
El pelaje blanco de los animales del ártico, que les permite ocultarse en la nieve.
El camuflaje de los saltamontes, que los hace parecer hojas.
Los movimientos del alcatraz de pata azul macho, para atraer a su pareja.
Las jirafas, de las que sobrevivieron las de cuello más largo.
El cambio de color de un camaleón cuando tiene una presa, o para protegerse.
El proceso de clonación, constantemente en desarrollo pero ya probado en los hechos, potencialmente podría interferir con la selección natural.
Los escarabajos de color marrón tienen mayor posibilidad de supervivencia, y tiene más descendientes volviéndose frecuente la población.
El caso de la totalidad de las especies que fueron desapareciendo, y que aún lo siguen haciendo.
Las chitas, de las que han sobrevivido las más rápidas.
La evolución del ser humano en diferentes especies, denominados homínidos.
La deformación de la mandíbula de la serpiente para tragar una presa más grande.
El cambio de coloración de algunas polillas, motivado por la revolución industrial en Inglaterra. (Aquí el cambio en el medio ambiente fue generado por el hombre)
La danza de meneo de las abejas.
La resistencia a los insecticidas de algunos insectos, que evidencian la cuestión de la selección como fuente de supervivencia.
La forma del pico de los pinzones se modificó a lo largo del tiempo, pues tras las sequías se endurecieron permitiendo comer semillas más duras.
La capacidad de los seres humanos de aprender a hablar.
Las orquídeas que son capaces de engañar a las avispas para que se ‘apareen’ con ellas.
Las serpientes rey no venenosas, que se mimetizan con las víboras de coral venenosas.
Los rituales de cortejo de las aves.