Las coreografías se realizan sobre una planigrafia. Es decir, plasmando en un papel los movimientos que han de ejecutarse. Estos métodos de notación son complejos y exigen una gran preparación por parte de quienes los realizan y de quienes deben interpretarlos.
No existe un único sistema de notación que a lo largo de la historia han ido evolucionando.
Los primeros intentos de anotar la danza se realizaron en el siglo XVI y llegaron de la mano de Thoinot Arbeau. En su libro “Orchésographie” propuso las primeras sistematizaciones de pasos y figuras mediante el uso de letras, palabras e ilustraciones. A él le siguieron estudiosos de la danza como Feuillet, autor de “Chorégraphie ou L’Art de décrire la dance”, donde se representaba la progresión en el suelo y se describía la acción de las piernas en relación al conjunto y a la medida musical. Actualmente, ese utilizan cuatro sistemas en planigrafía: Notación de Laban, Notación de Conté, Notación de Benesh y Notación de Wachmann. En Occidente los más empleados son Labanotation y la Notación Movimiento Benesh.
Elementos fundamentales de una coreografía
Seleccionada la canción y elegido el estilo, el primer trabajo que se debe hacer es seleccionar los pasos o rutinas más apropiadas.
Posteriormente hay que trabajar sobre la música, identificando las secciones que hay en el tema. En este punto los coreógrafos recomiendan ponerles nombre a cada una de ellas y observar cómo se repiten en la estructura musical, definiendo, además, qué estilo de movimiento se adecua a cada una de ellas.
Seguidamente hay que ponerse a bailar. Para ello es recomendable emplear una cámara de video y registrar las creaciones que surgen de cada improvisación. Cuando hayamos visionado las grabaciones y hayamos seleccionado los pasos es el momento de pasar a la notación. En este punto hay que preparar una línea básica de pies y luego añadir detalles de los brazos o la cabeza, si es que participan en la coreografía. Acto seguido hay que practicarlos ajustando y haciendo los cambios que se consideren oportunos.
Las coreografías se realizan sobre una planigrafia. Es decir, plasmando en un papel los movimientos que han de ejecutarse. Estos métodos de notación son complejos y exigen una gran preparación por parte de quienes los realizan y de quienes deben interpretarlos.
No existe un único sistema de notación que a lo largo de la historia han ido evolucionando.
Los primeros intentos de anotar la danza se realizaron en el siglo XVI y llegaron de la mano de Thoinot Arbeau. En su libro “Orchésographie” propuso las primeras sistematizaciones de pasos y figuras mediante el uso de letras, palabras e ilustraciones. A él le siguieron estudiosos de la danza como Feuillet, autor de “Chorégraphie ou L’Art de décrire la dance”, donde se representaba la progresión en el suelo y se describía la acción de las piernas en relación al conjunto y a la medida musical.
Actualmente, ese utilizan cuatro sistemas en planigrafía: Notación de Laban, Notación de Conté, Notación de Benesh y Notación de Wachmann. En Occidente los más empleados son Labanotation y la Notación Movimiento Benesh.
Elementos fundamentales de una coreografía
Seleccionada la canción y elegido el estilo, el primer trabajo que se debe hacer es seleccionar los pasos o rutinas más apropiadas.
Posteriormente hay que trabajar sobre la música, identificando las secciones que hay en el tema. En este punto los coreógrafos recomiendan ponerles nombre a cada una de ellas y observar cómo se repiten en la estructura musical, definiendo, además, qué estilo de movimiento se adecua a cada una de ellas.
Seguidamente hay que ponerse a bailar. Para ello es recomendable emplear una cámara de video y registrar las creaciones que surgen de cada improvisación. Cuando hayamos visionado las grabaciones y hayamos seleccionado los pasos es el momento de pasar a la notación. En este punto hay que preparar una línea básica de pies y luego añadir detalles de los brazos o la cabeza, si es que participan en la coreografía. Acto seguido hay que practicarlos ajustando y haciendo los cambios que se consideren oportunos.
ESPERO QUE TE SIRVA.