La vigorexia es un trastorno en el cual la persona se preocupa constantemente por parecer demasiado pequeña y débil. Por lo mismo, quienes sufren este problema realizan mucho deporte orientado a aumentar la masa muscular y para ello, también consumen suplementos proteicos y anabólicos.
Anorexia
Por lo general, las personas que tienen anorexia están obsesionadas con su físico y lo único que buscan es lucir cada vez más delgados. Por lo mismo, dejan de comer, toman remedios para inhibir el apetito o laxantes para perder más peso de lo recomendado.
Aunque esta enfermedad suele asociarse a las adolescentes, cada vez es más frecuente encontrarla también en hombres y personas adultas. Junto a esto, es importante estar atento a algunos factores que pueden gatillar el comienzo de este mal: trastornos de ansiedad en la niñez, tener una imagen negativa de sí mismo, tener problemas alimentarios durante la lactancia o la primera infancia, tener concepciones culturales o sociales muy cerradas respecto de la belleza, ser muy perfeccionista o demasiado centrado en reglas, pueden influir en la aparición de la anorexia.
Bulimia
Ataques de voracidad extrema, donde la persona come mucha comida, sobre todo, productos calóricos es una de las señales que delata a una persona que tiene bulimia. Luego de esto y ante un sentimiento de culpa, el afectado se provoca vómitos para no engordar.
Este trastorno lo sufren más mujeres que hombres, sobre todo en la etapa adolescente, y se caracteriza porque quien padece esto está sí está conciente de que su patrón de alimentación es anormal.
Aunque se desconoce la causa exacta de la bulimia, los factores genéticos, psicológicos, traumáticos, familiares, sociales o culturales pueden incidir en su aparición.
Ortorexia
Cuando existe una obsesión por comer sano, estamos frente a un caso de ortorexia. Aquí, la persona lleva un control exhaustivo y cada vez más estricto de los componentes de los alimentos que va a consumir.
Por lo general, esto comienza cuando la persona limita mucho su alimentación, por ejemplo evitando la ingesta de carne roja, huevos, azúcares, lácteos y grasas.
Todo esto es principalmente porque la gente con trastornos alimenticios utiliza la comida y el control de la comida como un intento para compensar los sentimientos y emociones que de otra manera son vistos como insoportables. Para algunos, la dieta, los atracones y la purgación pueden comenzar como una forma de lidiar con las emociones dolorosas y para sentirse en control de su vida personal, pero al final estos comportamientos dañan la salud física y emocional, la autoestima y la sensación de competitividad y control de la persona.
La vigorexia es un trastorno en el cual la persona se preocupa constantemente por parecer demasiado pequeña y débil. Por lo mismo, quienes sufren este problema realizan mucho deporte orientado a aumentar la masa muscular y para ello, también consumen suplementos proteicos y anabólicos.
Anorexia
Por lo general, las personas que tienen anorexia están obsesionadas con su físico y lo único que buscan es lucir cada vez más delgados. Por lo mismo, dejan de comer, toman remedios para inhibir el apetito o laxantes para perder más peso de lo recomendado.
Aunque esta enfermedad suele asociarse a las adolescentes, cada vez es más frecuente encontrarla también en hombres y personas adultas. Junto a esto, es importante estar atento a algunos factores que pueden gatillar el comienzo de este mal: trastornos de ansiedad en la niñez, tener una imagen negativa de sí mismo, tener problemas alimentarios durante la lactancia o la primera infancia, tener concepciones culturales o sociales muy cerradas respecto de la belleza, ser muy perfeccionista o demasiado centrado en reglas, pueden influir en la aparición de la anorexia.
BulimiaAtaques de voracidad extrema, donde la persona come mucha comida, sobre todo, productos calóricos es una de las señales que delata a una persona que tiene bulimia. Luego de esto y ante un sentimiento de culpa, el afectado se provoca vómitos para no engordar.
Este trastorno lo sufren más mujeres que hombres, sobre todo en la etapa adolescente, y se caracteriza porque quien padece esto está sí está conciente de que su patrón de alimentación es anormal.
Aunque se desconoce la causa exacta de la bulimia, los factores genéticos, psicológicos, traumáticos, familiares, sociales o culturales pueden incidir en su aparición.
OrtorexiaCuando existe una obsesión por comer sano, estamos frente a un caso de ortorexia. Aquí, la persona lleva un control exhaustivo y cada vez más estricto de los componentes de los alimentos que va a consumir.
Por lo general, esto comienza cuando la persona limita mucho su alimentación, por ejemplo evitando la ingesta de carne roja, huevos, azúcares, lácteos y grasas.
Todo esto es principalmente porque la gente con trastornos alimenticios utiliza la comida y el control de la comida como un intento para compensar los sentimientos y emociones que de otra manera son vistos como insoportables. Para algunos, la dieta, los atracones y la purgación pueden comenzar como una forma de lidiar con las emociones dolorosas y para sentirse en control de su vida personal, pero al final estos comportamientos dañan la salud física y emocional, la autoestima y la sensación de competitividad y control de la persona.