Hatun Tópac, después llamado Huiracocha Inca (quechua:Wiraqucha Inka, 'el Inca de Huiracocha'), fue el octavo gobernante del Curacazgo del Cuzco. Tomó el nombre de Viracocha Inca porque aseguró haber tenido un sueño divino con el dios Viracocha.
Durante su gobierno conquistó algunos señoríos, hizo algunas obras en la capital (Cuzco) y en las pocas provincias que había. Aceptó la rendición y entrega de Cuzco ante una embajada Chanca y escapó con sus hijos preferidos, esposas y sirvientes.
Hatun Tópac, después llamado Huiracocha Inca (quechua:Wiraqucha Inka, 'el Inca de Huiracocha'), fue el octavo gobernante del Curacazgo del Cuzco. Tomó el nombre de Viracocha Inca porque aseguró haber tenido un sueño divino con el dios Viracocha.
Durante su gobierno conquistó algunos señoríos, hizo algunas obras en la capital (Cuzco) y en las pocas provincias que había. Aceptó la rendición y entrega de Cuzco ante una embajada Chanca y escapó con sus hijos preferidos, esposas y sirvientes.