Hoy hablaremos de las necesidades y la finalidad de la publicidad, ya que en post anteriores hablamos de ¿qué es la publicidad? y de la comunicación en publicidad.
En cuanto a las necesidades podemos decir que es el estado psicofísico que nos marca lo que nos falta para obtener lo que deseamos.
Las necesidades no se crean, sino que son propias de cada individuo, y la publicidad las realza para poder vender.
Los tipos de necesidades se pueden clasificar en:
Necesidades básicas: también llamadas fisiológicas. Son el hambre, la sed, la necesidad de abrigo y sueño. Son las primeras que se buscan en satisfacer.
Necesidades de seguridad: satisfacer la sensación de peligro.
Necesidades sociales: estar en grupo y relacionarse.
Necesidades del Yo: autoestima, ser una mismo.
Necesidades de autorrealización: cumplir con todos los objetivos que se tienen en la vida. Afán de superación.
Motivación: es el estado que nos mueve para actuar hacia la satisfacción.
En cuanto a la finalidad de la publicidad podemos decir que:
La publicidad educa: Informa al consumidor sobre los beneficios de un determinado producto o servicio, resaltando la diferenciación sobre otras marcas.
La publicidad da «libertad» a los medios de comunicación porque a través del auspicio los canales son libres y no dependen del estado. De este modo se genera la libertad de prensa generando independencia y llevando información a los ciudadanos. Esto promueve democracia.
Uno de los principales objetivos de la publicidad es crear demanda o modificar las tendencias de demanda de un producto, bien o servicio. Entendiendo que la comercialización busca identificar el mercado apropiado para cada producto, la publicidad es la comunicación por la cual la información sobre el producto es transmitida a estos individuos, es decir, el público objetivo.
Los anuncios intentan generalmente encontrar una única proposición de venta, de cualquier producto y comunicarla al usuario. Esto puede tomar la forma de una característica única del producto o de una ventaja percibida, frente a la competencia creciente dentro del mercado, debido a los crecientes de sustitutivos, cada vez se produce más creación de marca en publicidad. Ésta consiste en comunicar cualidades que dan una cierta personalidad o reputación a una marca de fábrica, es decir, un valor de marca que la hace diferente a las de su competencia.
La notoriedad de marca es una manera importante en que la publicidad puede estimular la demanda de un tipo de producto determinado e incluso identificar como denominación propia a dicho producto. Por ejemplo: velcro (adhesivo textil), Pantys (lencería femenina), Scottex (papel higiénico), Zippo (tipo de mechero), Tippex o Dymo. La notoriedad de marca de fábrica se puede establecer a un mayor o mejor grado dependiendo del producto y del mercado. Por ejemplo, en Texas, es común oír a la gente referirse a cualquier bebida refrescante de cola como Coke, sin importar si es producida realmente por Coca Cola o no.
Cuando se crea tanto valor de marca que la marca tiene la capacidad de atraer a los compradores, incluso sin publicidad, se dice que se tiene notoriedad de marca.
La mayor notoriedad de marca se produce cuando la marca de fábrica es tan frecuente en la mente de la gente que se utiliza para describir una categoría entera de productos. Por ejemplo, Kleenex, puede identificarse como pañuelos de papel o como una etiqueta para una categoría de productos, es decir, se utiliza con frecuencia como término genérico.
Una de las firmas más aceradas al alcanzar una notoriedad de marca de fábrica es la aspiradora Hoover, cuyo nombre fue durante mucho tiempo en los países anglosajones sinónimo de aspiradora. Un riesgo legal de la notoriedad de marca es que el nombre puede aceptarse tan extensamente que se convierte en un término genérico, y pierde la protección de la marca registrada. Un ejemplo de esto sería la «Aspirina».
La publicidad usualmente tiene un propósito comunicativo y se mide con frecuencia por GRP`s, raiting, clicks, cantidad de impactos, contactos por mil, etc., y no necesariamente por cantidad de ventas realizadas. Si bien existen campañas de «promoción» o «inventarios» cuyo propósito específico es aumentar el volumen de ventas, y es bajo estos preceptos que es medida la efectividad de las mismas.
Respuesta:
Hoy hablaremos de las necesidades y la finalidad de la publicidad, ya que en post anteriores hablamos de ¿qué es la publicidad? y de la comunicación en publicidad.
En cuanto a las necesidades podemos decir que es el estado psicofísico que nos marca lo que nos falta para obtener lo que deseamos.
Las necesidades no se crean, sino que son propias de cada individuo, y la publicidad las realza para poder vender.
Los tipos de necesidades se pueden clasificar en:
Necesidades básicas: también llamadas fisiológicas. Son el hambre, la sed, la necesidad de abrigo y sueño. Son las primeras que se buscan en satisfacer.
Necesidades de seguridad: satisfacer la sensación de peligro.
Necesidades sociales: estar en grupo y relacionarse.
Necesidades del Yo: autoestima, ser una mismo.
Necesidades de autorrealización: cumplir con todos los objetivos que se tienen en la vida. Afán de superación.
Motivación: es el estado que nos mueve para actuar hacia la satisfacción.
En cuanto a la finalidad de la publicidad podemos decir que:
La publicidad educa: Informa al consumidor sobre los beneficios de un determinado producto o servicio, resaltando la diferenciación sobre otras marcas.
La publicidad da «libertad» a los medios de comunicación porque a través del auspicio los canales son libres y no dependen del estado. De este modo se genera la libertad de prensa generando independencia y llevando información a los ciudadanos. Esto promueve democracia.
Uno de los principales objetivos de la publicidad es crear demanda o modificar las tendencias de demanda de un producto, bien o servicio. Entendiendo que la comercialización busca identificar el mercado apropiado para cada producto, la publicidad es la comunicación por la cual la información sobre el producto es transmitida a estos individuos, es decir, el público objetivo.
Los anuncios intentan generalmente encontrar una única proposición de venta, de cualquier producto y comunicarla al usuario. Esto puede tomar la forma de una característica única del producto o de una ventaja percibida, frente a la competencia creciente dentro del mercado, debido a los crecientes de sustitutivos, cada vez se produce más creación de marca en publicidad. Ésta consiste en comunicar cualidades que dan una cierta personalidad o reputación a una marca de fábrica, es decir, un valor de marca que la hace diferente a las de su competencia.
La notoriedad de marca es una manera importante en que la publicidad puede estimular la demanda de un tipo de producto determinado e incluso identificar como denominación propia a dicho producto. Por ejemplo: velcro (adhesivo textil), Pantys (lencería femenina), Scottex (papel higiénico), Zippo (tipo de mechero), Tippex o Dymo. La notoriedad de marca de fábrica se puede establecer a un mayor o mejor grado dependiendo del producto y del mercado. Por ejemplo, en Texas, es común oír a la gente referirse a cualquier bebida refrescante de cola como Coke, sin importar si es producida realmente por Coca Cola o no.
Cuando se crea tanto valor de marca que la marca tiene la capacidad de atraer a los compradores, incluso sin publicidad, se dice que se tiene notoriedad de marca.
La mayor notoriedad de marca se produce cuando la marca de fábrica es tan frecuente en la mente de la gente que se utiliza para describir una categoría entera de productos. Por ejemplo, Kleenex, puede identificarse como pañuelos de papel o como una etiqueta para una categoría de productos, es decir, se utiliza con frecuencia como término genérico.
Una de las firmas más aceradas al alcanzar una notoriedad de marca de fábrica es la aspiradora Hoover, cuyo nombre fue durante mucho tiempo en los países anglosajones sinónimo de aspiradora. Un riesgo legal de la notoriedad de marca es que el nombre puede aceptarse tan extensamente que se convierte en un término genérico, y pierde la protección de la marca registrada. Un ejemplo de esto sería la «Aspirina».
La publicidad usualmente tiene un propósito comunicativo y se mide con frecuencia por GRP`s, raiting, clicks, cantidad de impactos, contactos por mil, etc., y no necesariamente por cantidad de ventas realizadas. Si bien existen campañas de «promoción» o «inventarios» cuyo propósito específico es aumentar el volumen de ventas, y es bajo estos preceptos que es medida la efectividad de las mismas.
si te gusto la respuesta dame coronita porfa