Gran Bretaña, Francia y Alemania se convirtieron en las grandes potencias liberales y democráticas de Europa desde 1870 hasta el año 1914.
Aunque también seguían estando los antiguos imperios absolutistas:
- El austrohúngaro
-El ruso
-El otomano
Estos imperios estaban en contra del Antiguo Régimen.
en que consistió el imperialismo de las naciones europeas
La industrialización y el enorme desarrollo tecnológico de Europa, especialmente en la época de la Segunda Revolución Industrial, provocaron la separación del mundo en dos grandes grupos: los países industrializados y los no industrializados. Los primeros terminaron por imponerse sobre los segundos, que quedaron bajo su dependencia directa o indirecta. La Europa industrial, gracias a su vitalidad demográfica, su superioridad industrial, técnica, comercial y financiera impuso su modelo económico, sus valores, ideales y su cultura a gran parte del mundo.
El imperialismo se puede definir como el sistema en el que la política, la economía y la cultura de una parte del mundo se organizan en función del dominio de unos países sobre otros. El imperialismo que surge en el siglo XIX fue la culminación del colonialismo iniciado en los siglos XV y XVI. Pero ambas formas de dominación colonial fueron muy distintas. Los viejos imperios coloniales estuvieron ubicados principalmente en América, mientras que los nuevos imperios coloniales se centraron en Asia y África. Las antiguas colonias habían sido de asentamiento y los emigrantes habían creado sociedades que pretendían ser similares a las europeas, frente a las nuevas colonias que fueron, sobre todo, territorios de ocupación, donde una minoría europea no se mezclaba con la autóctona y ejercía el control político y económico. Por otro lado, si el ritmo de ocupación había sido lento y limitado en el pasado, en el siglo XIX la rapidez fue la tónica general. Por último, las posesiones coloniales de la época moderna dieron lugar a escasos conflictos en comparación con los desarrollados con el imperialismo del siglo XIX, con guerras constantes, ya que la expansión colonial se había convertido en un objetivo fundamental de la economía y la política de los países industrializados.
Explicación:
En 1914 las potencias europeas eran fuertes y ricas. Constantemente estaban en conflictos los cuales los solucionaban por medio de acuerdos diplomáticos o bien por geurras que se mantenían estrictamente en lo local.Los enfrentamientos ya no solo se podían presentar en Europa sino que también en África, China o Medio Oriente.
Hacia el fines de siglo XIX y principios del XX surgieron dos nuevos competidores nuevos en el panorama internacional como Estados Unidos y Japón que se habían convertido en grandes potencias que se disputaban el dominio del área del Pacífico.
Además aparecía en el escenario europeo Alemania como una nueva corona que surgía pujante y poderosa, pero insatisfecha por haber llegado tarde al reparto colonial.
Sus intereses expansionistas en China y África del Sur chocaban con el dominio que los ingleses habían establecido en esas zonas. Justamente, las posiciones irreconciliables entre Alemania e Inglaterra fueron las que generaron un sistema de alianzas permanentes que puso en peligro la paz mundial. Por un lado, se formó la Triple Alianza, que en realidad fue sólo una alianza entre Alemania y Austria-Hungría, pues Italia, el tercer integrante, no tardó en apartarse. Por otro, Francia, el Imperio ruso y Gran Bretaña se unieron en la Triple Entente.
Respuesta:
cual fue la potencia dominante del siglo XIX
Gran Bretaña, Francia y Alemania se convirtieron en las grandes potencias liberales y democráticas de Europa desde 1870 hasta el año 1914.
Aunque también seguían estando los antiguos imperios absolutistas:
- El austrohúngaro
-El ruso
-El otomano
Estos imperios estaban en contra del Antiguo Régimen.
en que consistió el imperialismo de las naciones europeas
La industrialización y el enorme desarrollo tecnológico de Europa, especialmente en la época de la Segunda Revolución Industrial, provocaron la separación del mundo en dos grandes grupos: los países industrializados y los no industrializados. Los primeros terminaron por imponerse sobre los segundos, que quedaron bajo su dependencia directa o indirecta. La Europa industrial, gracias a su vitalidad demográfica, su superioridad industrial, técnica, comercial y financiera impuso su modelo económico, sus valores, ideales y su cultura a gran parte del mundo.
El imperialismo se puede definir como el sistema en el que la política, la economía y la cultura de una parte del mundo se organizan en función del dominio de unos países sobre otros. El imperialismo que surge en el siglo XIX fue la culminación del colonialismo iniciado en los siglos XV y XVI. Pero ambas formas de dominación colonial fueron muy distintas. Los viejos imperios coloniales estuvieron ubicados principalmente en América, mientras que los nuevos imperios coloniales se centraron en Asia y África. Las antiguas colonias habían sido de asentamiento y los emigrantes habían creado sociedades que pretendían ser similares a las europeas, frente a las nuevas colonias que fueron, sobre todo, territorios de ocupación, donde una minoría europea no se mezclaba con la autóctona y ejercía el control político y económico. Por otro lado, si el ritmo de ocupación había sido lento y limitado en el pasado, en el siglo XIX la rapidez fue la tónica general. Por último, las posesiones coloniales de la época moderna dieron lugar a escasos conflictos en comparación con los desarrollados con el imperialismo del siglo XIX, con guerras constantes, ya que la expansión colonial se había convertido en un objetivo fundamental de la economía y la política de los países industrializados.
Explicación:
En 1914 las potencias europeas eran fuertes y ricas. Constantemente estaban en conflictos los cuales los solucionaban por medio de acuerdos diplomáticos o bien por geurras que se mantenían estrictamente en lo local.Los enfrentamientos ya no solo se podían presentar en Europa sino que también en África, China o Medio Oriente.
Hacia el fines de siglo XIX y principios del XX surgieron dos nuevos competidores nuevos en el panorama internacional como Estados Unidos y Japón que se habían convertido en grandes potencias que se disputaban el dominio del área del Pacífico.
Además aparecía en el escenario europeo Alemania como una nueva corona que surgía pujante y poderosa, pero insatisfecha por haber llegado tarde al reparto colonial.
Sus intereses expansionistas en China y África del Sur chocaban con el dominio que los ingleses habían establecido en esas zonas. Justamente, las posiciones irreconciliables entre Alemania e Inglaterra fueron las que generaron un sistema de alianzas permanentes que puso en peligro la paz mundial. Por un lado, se formó la Triple Alianza, que en realidad fue sólo una alianza entre Alemania y Austria-Hungría, pues Italia, el tercer integrante, no tardó en apartarse. Por otro, Francia, el Imperio ruso y Gran Bretaña se unieron en la Triple Entente.
Explicación: