Las fotos primero se sacan con los ojos para luego, mediante la cámara, inmortalizarlas en papel (o en un archivo digital). La diferencia radica en que la visión no tiene límites establecidos (o se ignoran) mientras las cámaras fotográficas sí y dichos límites, conocidos como bordes, serán el marco de todas tus fotografías.
Las fotos primero se sacan con los ojos para luego, mediante la cámara, inmortalizarlas en papel (o en un archivo digital). La diferencia radica en que la visión no tiene límites establecidos (o se ignoran) mientras las cámaras fotográficas sí y dichos límites, conocidos como bordes, serán el marco de todas tus fotografías.