El monocultivo es una de las técnicas más básicas dentro de la agricultura, pero ¿cuáles son los riesgos del monocultivo? Y, ¿cómo afecta el monocultivo al suelo? Si bien el monocultivo permite obtener mayores beneficios y minimizar la cantidad de herramientas maquinaria necesaria, pero a cambio lleva asociados ciertos problemas específicos como el empobrecimiento del suelo, ya que se abusa de los mismos nutrientes, y una mayor exposición a plagas y enfermedades, que son más difíciles de combatir debido a la falta de diversidad biológica.
¿Qué Es el Monocultivo?
El monocultivo es una forma de agricultura que se basa en la siembra de un solo tipo de cultivo en un campo. En cambio, un sistema de policultivo implica que en un campo se siembran dos o más cultivos al mismo tiempo. Cabe señalar que el concepto de monocultivo también se aplica a los animales de granja: consiste en criar sólo una especie de animal en la explotación, como vacas lecheras, ovejas, cerdos, pollos, etc.
Cuando se habla de monocultivo, es importante señalar que, aunque cada año se plante un cultivo diferente en una parcela determinada, el concepto de un único cultivo en el campo a la vez se sigue denominando “monocultivo”.
Una vez expuesta la definición de monocultivo, veamos cuáles son los beneficios del monocultivo y cuáles son las consecuencias negativas del monocultivo.
Ventajas del Monocultivo
Mayor Productividad y Eficiencia
El monocultivo maximiza el uso del suelo y las condiciones climáticas locales. En la mayoría de los casos, los agricultores seleccionan el cultivo que mejor se desarrolla en el entorno local. Los efectos positivos del monocultivo se observan a menudo en cultivos como el arroz (que se cultiva en condiciones similares a las de los humedales) y el trigo (que se cultiva en zonas llanas con mucha luz solar). Las plantas que pueden resistir o prosperar en condiciones climáticas concretas (por ejemplo, en sequías, en zonas con fuertes vientos o con temperatura media más fría de lo normal) se convierten en el punto central del sistema de monocultivo agrícola. Un agricultor tradicional normalmente se preocupa por la variedad de cultivos y pone en práctica un complejo calendario de siembra, mantenimiento y cosecha para maximizar la producción de los distintos cultivos plantados; a pesar de este mayor esfuerzo, la productividad y eficiencia del monocultivo suelen ser mayores.
Favorece el Uso de Nuevas Tecnologías
Cuando se cultivan cultivos bajo la técnica de monocultivo los agricultores suelen disponer de más tiempo y recursos financieros para usar nuevas tecnologías que les ayudan a maximizar su rendimiento agrícola. Entre las soluciones técnicas más novedosas se encuentran los drones, sensores terrestres y datos obtenidos por satélite. Una de las tecnologías más innovadoras y completas en esta materia son las herramientas satelitales que se utilizan para una monitorización compleja del campo y la gestión de todas las etapas de siembra y cultivo en él. Un brillante ejemplo de estas nuevas tecnologías es Crop Monitoring, una herramienta de alto rendimiento que ayuda a los agricultores en sus actividades cotidianas, tanto en grandes como en pequeñas explotaciones agrícolas de cualquier rincón del planeta.
Respuesta:
El monocultivo es una de las técnicas más básicas dentro de la agricultura, pero ¿cuáles son los riesgos del monocultivo? Y, ¿cómo afecta el monocultivo al suelo? Si bien el monocultivo permite obtener mayores beneficios y minimizar la cantidad de herramientas maquinaria necesaria, pero a cambio lleva asociados ciertos problemas específicos como el empobrecimiento del suelo, ya que se abusa de los mismos nutrientes, y una mayor exposición a plagas y enfermedades, que son más difíciles de combatir debido a la falta de diversidad biológica.
¿Qué Es el Monocultivo?
El monocultivo es una forma de agricultura que se basa en la siembra de un solo tipo de cultivo en un campo. En cambio, un sistema de policultivo implica que en un campo se siembran dos o más cultivos al mismo tiempo. Cabe señalar que el concepto de monocultivo también se aplica a los animales de granja: consiste en criar sólo una especie de animal en la explotación, como vacas lecheras, ovejas, cerdos, pollos, etc.
Cuando se habla de monocultivo, es importante señalar que, aunque cada año se plante un cultivo diferente en una parcela determinada, el concepto de un único cultivo en el campo a la vez se sigue denominando “monocultivo”.
Una vez expuesta la definición de monocultivo, veamos cuáles son los beneficios del monocultivo y cuáles son las consecuencias negativas del monocultivo.
Ventajas del Monocultivo
Mayor Productividad y Eficiencia
El monocultivo maximiza el uso del suelo y las condiciones climáticas locales. En la mayoría de los casos, los agricultores seleccionan el cultivo que mejor se desarrolla en el entorno local. Los efectos positivos del monocultivo se observan a menudo en cultivos como el arroz (que se cultiva en condiciones similares a las de los humedales) y el trigo (que se cultiva en zonas llanas con mucha luz solar). Las plantas que pueden resistir o prosperar en condiciones climáticas concretas (por ejemplo, en sequías, en zonas con fuertes vientos o con temperatura media más fría de lo normal) se convierten en el punto central del sistema de monocultivo agrícola. Un agricultor tradicional normalmente se preocupa por la variedad de cultivos y pone en práctica un complejo calendario de siembra, mantenimiento y cosecha para maximizar la producción de los distintos cultivos plantados; a pesar de este mayor esfuerzo, la productividad y eficiencia del monocultivo suelen ser mayores.
Favorece el Uso de Nuevas Tecnologías
Cuando se cultivan cultivos bajo la técnica de monocultivo los agricultores suelen disponer de más tiempo y recursos financieros para usar nuevas tecnologías que les ayudan a maximizar su rendimiento agrícola. Entre las soluciones técnicas más novedosas se encuentran los drones, sensores terrestres y datos obtenidos por satélite. Una de las tecnologías más innovadoras y completas en esta materia son las herramientas satelitales que se utilizan para una monitorización compleja del campo y la gestión de todas las etapas de siembra y cultivo en él. Un brillante ejemplo de estas nuevas tecnologías es Crop Monitoring, una herramienta de alto rendimiento que ayuda a los agricultores en sus actividades cotidianas, tanto en grandes como en pequeñas explotaciones agrícolas de cualquier rincón del planeta.