Se instalaron una serie de sensores de movimiento a lo largo de todo el puente de tal manera que cuando una persona pasa caminando al lado de la barandilla del puente esta se ilumina en pequeñas secciones y dejaba al descubierto escuetos mensajes de esperanza, preguntas que invitan a reflexionar, sitios a los que acudir en busca de ayuda, fotos de personas alegres y niños riendo. La persona puede ir paseando por el puente y puede ir leyendo perfectamente dichos mensajes. Es una forma de «comunicación» entre el puente y el potencial suicida.
Se instalaron una serie de sensores de movimiento a lo largo de todo el puente de tal manera que cuando una persona pasa caminando al lado de la barandilla del puente esta se ilumina en pequeñas secciones y dejaba al descubierto escuetos mensajes de esperanza, preguntas que invitan a reflexionar, sitios a los que acudir en busca de ayuda, fotos de personas alegres y niños riendo. La persona puede ir paseando por el puente y puede ir leyendo perfectamente dichos mensajes. Es una forma de «comunicación» entre el puente y el potencial suicida.