A la hora de pensar el arte del Medioevo, debemos considerar que surgió en un momento de la historia en el que no existía la noción del arte como un fin en sí mismo, ni siquiera el de las Bellas Artes, sino de las artes mecánicas, vinculadas con el oficio.
Así, el arte medieval tenía una función clara, que podía ser:
Servir de ofrenda a Dios.
Servir de acompañamiento pedagógico de los ritos y saberes cristianos.
Ser una afirmación del poder político (retratos de reyes, nobles, etc.) o religioso (escenas religiosas).
En muchos casos el arte medieval sufrió influencia de otras culturas invasoras o limítrofes, como ocurre con el arte bizantino, con el ibérico mozárabe, entre otros. Grandes obras de pintura, arquitectura y música fueron compuestas durante este período.
Iglesia de la Edad Media
Uno de los rasgos más conocidos del Medioevo fue la omnipresencia de la Iglesia Católica, cuyas intervenciones en la política eran constantes y fundamentales. A menudo se caracteriza esta época por sus gobiernos teocráticos, en los que la Iglesia coronaba reyes y los avalaba como emisarios de Dios en la tierra.
RELIGIÓN
La Iglesia controló la letra escrita, los saberes oficiales y ejerció funciones judiciales, ya que las leyes con que la sociedad se regía eran las religiosas, más allá de las impuestas por los señores feudales en sus respectivos gobiernos locales. Las autoridades eclesiásticas podían, incluso, enjuiciar reyes y nobles, pues la ley de Dios estaba por encima de la de los hombres.
En ese sentido, el rol de la Santa Inquisición de la Iglesia Católica fue tristemente célebre. Sus representantes actuaban como emisarios del poder eclesiástico que sometían a cuestionamiento la fe de las personas acusadas de brujería, pactos demoníacos o paganismo.
En estos procesos podía verse involucrada cualquier persona acusada por sus enemigos, científicos dedicados a la investigación, o mujeres acusadas de brujas. La sola acusación servía para que la Inquisición tomara el asunto en sus propias y brutales manos, y sometiera a las personas a torturas, vejámenes y persecuciones.
La cultura durante la Edad Media
En la alta Edad Media (del siglo V al IX) se produjo un gran vacío musical. Todo estaba en contra de la evolución. En el ámbito social no había estabilidad: cada región tenía un señor feudal y las guerras eran constantes. La notable unión conseguida por el Imperio Romano había quedado disgregada y había muy poca comunicación entre las poblaciones. Hizo falta mucho tiempo para que hubiera unas mínimas garantías de supervivencia y la tranquilidad necesaria para que pudiera aflorar algún tipo de cultura.
Sólo una institución mantenía una cierta estabilidad y estructura organizativa donde poder dedicar algún tiempo a cultivar el espíritu: la Iglesia. Los monasterios eran focos donde se conservaban y copiaban las obras de la antigüedad y desde donde los monjes salían para predicar y enseñar a los campesinos. Por lo tanto, a la Iglesia le debemos la mínima continuidad musical con el legado de la Antigüedad greco-romana.
1. La función de la música religiosa en la sociedad medieval
Como la pintura mural, los bajorrelieves y tallas en los capiteles de las columnas, la música medieval tuvo una finalidad didáctica: inculcar en el pueblo creyente la actitud de oración y de contemplación. El canto gregoriano fue un canto unificado que nació precisamente para fortalecer el sentimiento de unidad cristiana de Europa. Era un canto de estilo monódico cantado en latín con ritmo libre o mejor dicho, dependiente del texto religioso que se cantara.
Los monasterios eran los únicos centros del saber. En ellos se enseñaba el trivium (Gramática, Retórica y Dialéctica) y el quadrivium (Aritmética, Geometría, Música y Astronomía). Con la reforma del Cluny (siglo X) se expande el arte románico, que, junto con el latín como lengua oficial de la Iglesia y del saber se convierten en los verdaderos elementos unificadores de Europa.
2. Los códices medievales
Durante la Edad Media, la música eclesiástica (el canto gregoriano y sus derivados) fue conservada mediante la tradición oral, y una vez que fue posible escribir música, más o menos desde el siglo IX, los manuscritos que la contenían, llamados códices, fueron cuidadosamente copiados y custodiados durante siglos en iglesias y monasterios. Así se estableció una distinción clara entre música escrita y música popular transmitida por tradición oral, que hoy llamamos folclore.
En general, el público de esta música escrita, y por tanto más elaborada (artística, si se prefiere), se limitaba a los afortunados que podían disfrutarla en iglesias o cortes nobiliarias con la suficiente immportancia como para poder mantener una capilla musical, es decir, un cuerpo de cantantes contratados.
Por lo tanto, será durante el desarrollo del estilo románico la gran época de creación del canto gregoriano, también llamado canto llano que se extiende por Occidente durante toda la Edad Media.
Respuesta:
Explicación:
Arte de la Edad Media
A la hora de pensar el arte del Medioevo, debemos considerar que surgió en un momento de la historia en el que no existía la noción del arte como un fin en sí mismo, ni siquiera el de las Bellas Artes, sino de las artes mecánicas, vinculadas con el oficio.
Así, el arte medieval tenía una función clara, que podía ser:
Servir de ofrenda a Dios.
Servir de acompañamiento pedagógico de los ritos y saberes cristianos.
Ser una afirmación del poder político (retratos de reyes, nobles, etc.) o religioso (escenas religiosas).
En muchos casos el arte medieval sufrió influencia de otras culturas invasoras o limítrofes, como ocurre con el arte bizantino, con el ibérico mozárabe, entre otros. Grandes obras de pintura, arquitectura y música fueron compuestas durante este período.
Iglesia de la Edad Media
Uno de los rasgos más conocidos del Medioevo fue la omnipresencia de la Iglesia Católica, cuyas intervenciones en la política eran constantes y fundamentales. A menudo se caracteriza esta época por sus gobiernos teocráticos, en los que la Iglesia coronaba reyes y los avalaba como emisarios de Dios en la tierra.
RELIGIÓN
La Iglesia controló la letra escrita, los saberes oficiales y ejerció funciones judiciales, ya que las leyes con que la sociedad se regía eran las religiosas, más allá de las impuestas por los señores feudales en sus respectivos gobiernos locales. Las autoridades eclesiásticas podían, incluso, enjuiciar reyes y nobles, pues la ley de Dios estaba por encima de la de los hombres.
En ese sentido, el rol de la Santa Inquisición de la Iglesia Católica fue tristemente célebre. Sus representantes actuaban como emisarios del poder eclesiástico que sometían a cuestionamiento la fe de las personas acusadas de brujería, pactos demoníacos o paganismo.
En estos procesos podía verse involucrada cualquier persona acusada por sus enemigos, científicos dedicados a la investigación, o mujeres acusadas de brujas. La sola acusación servía para que la Inquisición tomara el asunto en sus propias y brutales manos, y sometiera a las personas a torturas, vejámenes y persecuciones.
La cultura durante la Edad Media
En la alta Edad Media (del siglo V al IX) se produjo un gran vacío musical. Todo estaba en contra de la evolución. En el ámbito social no había estabilidad: cada región tenía un señor feudal y las guerras eran constantes. La notable unión conseguida por el Imperio Romano había quedado disgregada y había muy poca comunicación entre las poblaciones. Hizo falta mucho tiempo para que hubiera unas mínimas garantías de supervivencia y la tranquilidad necesaria para que pudiera aflorar algún tipo de cultura.
Sólo una institución mantenía una cierta estabilidad y estructura organizativa donde poder dedicar algún tiempo a cultivar el espíritu: la Iglesia. Los monasterios eran focos donde se conservaban y copiaban las obras de la antigüedad y desde donde los monjes salían para predicar y enseñar a los campesinos. Por lo tanto, a la Iglesia le debemos la mínima continuidad musical con el legado de la Antigüedad greco-romana.
1. La función de la música religiosa en la sociedad medieval
Como la pintura mural, los bajorrelieves y tallas en los capiteles de las columnas, la música medieval tuvo una finalidad didáctica: inculcar en el pueblo creyente la actitud de oración y de contemplación. El canto gregoriano fue un canto unificado que nació precisamente para fortalecer el sentimiento de unidad cristiana de Europa. Era un canto de estilo monódico cantado en latín con ritmo libre o mejor dicho, dependiente del texto religioso que se cantara.
Los monasterios eran los únicos centros del saber. En ellos se enseñaba el trivium (Gramática, Retórica y Dialéctica) y el quadrivium (Aritmética, Geometría, Música y Astronomía). Con la reforma del Cluny (siglo X) se expande el arte románico, que, junto con el latín como lengua oficial de la Iglesia y del saber se convierten en los verdaderos elementos unificadores de Europa.
2. Los códices medievales
Durante la Edad Media, la música eclesiástica (el canto gregoriano y sus derivados) fue conservada mediante la tradición oral, y una vez que fue posible escribir música, más o menos desde el siglo IX, los manuscritos que la contenían, llamados códices, fueron cuidadosamente copiados y custodiados durante siglos en iglesias y monasterios. Así se estableció una distinción clara entre música escrita y música popular transmitida por tradición oral, que hoy llamamos folclore.
En general, el público de esta música escrita, y por tanto más elaborada (artística, si se prefiere), se limitaba a los afortunados que podían disfrutarla en iglesias o cortes nobiliarias con la suficiente immportancia como para poder mantener una capilla musical, es decir, un cuerpo de cantantes contratados.
Por lo tanto, será durante el desarrollo del estilo románico la gran época de creación del canto gregoriano, también llamado canto llano que se extiende por Occidente durante toda la Edad Media.