La Administración de Clinton y el Congreso han aportado mas de $1 billón de dólares en un paquete de ayuda a Colombia, quien ya está uno de los tres mayores recipientes de fondos militares de los EE.UU. El monto total de este dinero sería destinado a la milicia. Una vez mas, Colombia podría convertirse en el escenario de una acción militar mayor por parte del imperialismo de EE.UU.
Washington alega que esta ayuda esta primordialmente dirigida en contra de la rampante producción y en contra del trafico de drogas en Colombia. (Colombia ha sido por muchos años el mayor productor y exportador de cocaína y de mucha de la heroína que entra en los Estados Unidos.) Pero en realidad la guerra contra las drogas es un pretexto transparente para combatir a los dos grupos mayoritarios en la larga guerra de guerrillas que ha mantenido Colombia por 40 años: las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), quienes infligieron muchas derrotas severas a las fuerzas militares del gobierno en 1999, y al más pequeño Ejercito de Liberación Nacional (ELN). Las FARC fue fundado por el Partido Comunista de Colombia; el ELN traza su inspiración de la Revolución Cubana.
Las negociaciones entre el gobierno del Partido Conservador de Andrés Pastrana con las FARC se han estado arrastrando por cerca de un año. En abril el gobierno finalmente accedió a las demandas del ELN y les concedió, como a las FARC, una extensa zona desmilitarizada de fuerzas gubernamentales. Estas zonas fueron acordadas en contra de una substancial oposición de las fuerzas del ala derechista, incluyendo a muchos de los militares de alto rango, con el propósito de comenzar charlas de cese al fuego y de paz con la guerrilla.
La campaña de los Estados Unidos en contra de las guerrillas descansa en una dirección más fundamental, reconocida abiertamente por el propio Bill Clinton. El 2 de mayo, el presidente advirtió en un tono apocalíptico de las posibles consecuencias del colapso del régimen Colombiano: "No se equivoquen. Si la más antigua democracia en Sur América puede ser derribada, también lo pudiesen ser otras." El verdadero asunto emergió cuando Clinton le dijo a la asamblea de ejecutivos corporativos que la derrota de las guerrillas era esencial para la realización de un Área de Libre Comercio de las Américas (ALCA) que se extendería desde Alaska hasta Argentina para el 2005:
Tenemos que triunfar en Colombia. Tenemos que ganar la lucha por un Área de Libre Comercio de las Américas. Tenemos que demostrar que la libertad y el mercado libre van tomados de la mano.
Eso es todo, la avasalladora preocupación de los EEUU en la guerra civil en Colombia es prevenir cualquier interferencia en su esfuerzo para intensificar la explotación imperialista en Latino América. En junio de 1999, en una reunión de la Organización de los Estados Americanos, los EEUU propusieron la creación de una fuerza multinacional que garantizara la "seguridad" del Hemisferio Occidental. A pesar de las mentiras oficiales, ya hay en Colombia centenares de "consejeros militares" estadounidenses.
La Administración de Clinton y el Congreso han aportado mas de $1 billón de dólares en un paquete de ayuda a Colombia, quien ya está uno de los tres mayores recipientes de fondos militares de los EE.UU. El monto total de este dinero sería destinado a la milicia. Una vez mas, Colombia podría convertirse en el escenario de una acción militar mayor por parte del imperialismo de EE.UU.
Washington alega que esta ayuda esta primordialmente dirigida en contra de la rampante producción y en contra del trafico de drogas en Colombia. (Colombia ha sido por muchos años el mayor productor y exportador de cocaína y de mucha de la heroína que entra en los Estados Unidos.) Pero en realidad la guerra contra las drogas es un pretexto transparente para combatir a los dos grupos mayoritarios en la larga guerra de guerrillas que ha mantenido Colombia por 40 años: las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), quienes infligieron muchas derrotas severas a las fuerzas militares del gobierno en 1999, y al más pequeño Ejercito de Liberación Nacional (ELN). Las FARC fue fundado por el Partido Comunista de Colombia; el ELN traza su inspiración de la Revolución Cubana.
Las negociaciones entre el gobierno del Partido Conservador de Andrés Pastrana con las FARC se han estado arrastrando por cerca de un año. En abril el gobierno finalmente accedió a las demandas del ELN y les concedió, como a las FARC, una extensa zona desmilitarizada de fuerzas gubernamentales. Estas zonas fueron acordadas en contra de una substancial oposición de las fuerzas del ala derechista, incluyendo a muchos de los militares de alto rango, con el propósito de comenzar charlas de cese al fuego y de paz con la guerrilla.
La campaña de los Estados Unidos en contra de las guerrillas descansa en una dirección más fundamental, reconocida abiertamente por el propio Bill Clinton. El 2 de mayo, el presidente advirtió en un tono apocalíptico de las posibles consecuencias del colapso del régimen Colombiano: "No se equivoquen. Si la más antigua democracia en Sur América puede ser derribada, también lo pudiesen ser otras." El verdadero asunto emergió cuando Clinton le dijo a la asamblea de ejecutivos corporativos que la derrota de las guerrillas era esencial para la realización de un Área de Libre Comercio de las Américas (ALCA) que se extendería desde Alaska hasta Argentina para el 2005:
Tenemos que triunfar en Colombia. Tenemos que ganar la lucha por un Área de Libre Comercio de las Américas. Tenemos que demostrar que la libertad y el mercado libre van tomados de la mano.Eso es todo, la avasalladora preocupación de los EEUU en la guerra civil en Colombia es prevenir cualquier interferencia en su esfuerzo para intensificar la explotación imperialista en Latino América. En junio de 1999, en una reunión de la Organización de los Estados Americanos, los EEUU propusieron la creación de una fuerza multinacional que garantizara la "seguridad" del Hemisferio Occidental. A pesar de las mentiras oficiales, ya hay en Colombia centenares de "consejeros militares" estadounidenses.