El sector agrícola es el primer empleador a nivel mundial y los activos familiares constituyen la mayor parte de esta fuerza de trabajo. Más del 70% de la producción alimentaria procede de la agricultura familiar, que gestiona una parte considerable de los recursos naturales. Este modelo de agricultura, que se caracteriza por su diversidad y resiliencia, tiene capacidad para aportar respuestas adaptadas a los retos alimentarios, sociales y medioambientales. El reconocimiento y el apoyo a las agriculturas familiares son indispensables para luchar contra la pobreza y construir un desarrollo sostenible.
El sector agrícola es el primer empleador a nivel mundial y los activos familiares constituyen la mayor parte de esta fuerza de trabajo. Más del 70% de la producción alimentaria procede de la agricultura familiar, que gestiona una parte considerable de los recursos naturales. Este modelo de agricultura, que se caracteriza por su diversidad y resiliencia, tiene capacidad para aportar respuestas adaptadas a los retos alimentarios, sociales y medioambientales. El reconocimiento y el apoyo a las agriculturas familiares son indispensables para luchar contra la pobreza y construir un desarrollo sostenible.