Las desigualdad es una realidad en el mundo actual, la encontramos fundamentada en diversos aspectos, el sexo, el color de piel, el estatus social, en la orientación sexual, entre otros. Sufragistas ilustra la historia de un personaje en particular, Maude, una chica que trabaja en una lavandería, realizando el trabajo no solo de ella si no en ocasiones de sus compañeros, recibiendo un salario miserable, siendo acosada y abusada verbal y sexualmente por sus superiores dentro de la fabrica. Esta violencia no termina una vez que llega a casa si no que continúa allí, donde se ve limitada a ser una madre silenciosa y obediente, su opinión se encuentra coartada. Maude y otros personajes dentro de la película representan la realidad actual de muchas personas.
En esta producción se muestra como las mujeres han marchado por sus derechos durante mucho tiempo, sin embargo empiezan a desesperar cuando las promesas que el gobierno les realiza empiezan a ser rotas una y otra vez, humillándolas, entonces comienzan a movilizarse, mostrando que la sociedad solo responde cuando se encuentran sacudidos por actos de violencia, para ello Maude se fundamenta planteando que “quemamos cosas, rompemos ventanas porque la violencia es lo único a lo que los hombres escuchan, porque nos han golpeado y nos han abandonado y ya no nos queda nada” en esta frase el personaje manifiesta que los oídos sordos de la prensa, la sociedad y el gobierno son los que usualmente hacen que se lleven a cabo actos cargados de violencia, en pos de ser escuchados, de generar un impacto. El personaje de Violet Miller tiene otra de las frases célebres de la película cuando se queja “¿quieres que respetemos las leyes? haz leyes respetables” tanto en ese momento como en la actualidad hay leyes que piden a gritos ser respetadas y de no ser así, el castigo es inminente pero a caso ¿son esas leyes dignas de ser respetadas? hay que destacar que esta película es una representación de los derechos coartados de las mujeres en el Reino Unido, hace mucho tiempo, sin embargo si buscamos en la actualidad no demoraremos en encontrar un sinfín de leyes que violan los derechos no solo de las mujeres, si no de los seres humanos.
Emmeline Pankhurst, la líder intelectual de los movimientos sufragistas en el Reino Unido, interpretada por la magnifica Meryl Streep tiene una de las lineas más ricas en la película;
“Por 50 años, hemos marchado pacíficamente para lograr el voto para las mujeres. Hemos sido ridiculizadas e ignoradas. Estamos luchando por un tiempo en el que cada niña pequeña que nazca en el mundo, tenga las mismas oportunidades que su hermano. Nunca subestimen el poder que tenemos las mujeres para definir nuestro propio destino. No queremos romper las leyes. Queremos hacer las leyes. Sean militantes, cada una de ustedes, en la forma que puedan. Las que puedan romper ventanas, rómpanlas. No nos han dejado otra opción que desafiar al gobierno. Si debemos ir a prisión para obtener el voto, entonces dejen que sean las ventanas del gobierno y no los cuerpos de las mujeres los que sean rotos. Incito a esta reunión y a todas las mujeres de Gran Bretaña a la rebelión. Prefiero ser una rebelde a una esclava.”
Cuando dijeron que esta película iba a salir, muchas personas renegaron que las películas sobre los derechos de las mujeres ya eran un tópico gastado, al igual que todos los temas relacionados con la desigualdad y las minorías, sin embargo, que estés aburrido de verlo en las producciones de Hollywood no significa que esto sea una cuestión del pasado, que haya que dejar de reflexionar sobre este tema y estar al tanto de lo que sucede en el mundo actual.
Centrémonos un momento en la siguiente noticia: un grupo de mujeres árabes se presentaron a la denominada “Primavera árabe”. Como líderes y agentes del cambio en los levantamientos, asumieron los mismos riesgos que los hombres al exponerse a abusos cometidos por el Estado. Sufrieron hostigamiento, acoso, torturas y malos tratos, como agresiones sexuales y amenazas de violación, relacionados específicamente con su condición de mujeres; un caso muy notorio fueron las “pruebas de virginidad” a las que fueron sometidas algunas manifestantes en Egipto. Leyendo esto parece que estuviéramos hablando de varias escenas muy similares a las de la película Sufragistas, la diferencia es que esta situación se dio en el año 2012 y se ha vuelto a dar en distintos movimientos que se han realizado en la actualidad. En Yemen las mujeres no pueden escoger con quien casarse, algunas incluso son obligadas a contraer matrimonio cuando son menores de edad. En Arabia Saudí las mujeres no pueden viajar, tener trabajos remunerados, no pueden conducir ni recibir educación superior.
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Las desigualdad es una realidad en el mundo actual, la encontramos fundamentada en diversos aspectos, el sexo, el color de piel, el estatus social, en la orientación sexual, entre otros. Sufragistas ilustra la historia de un personaje en particular, Maude, una chica que trabaja en una lavandería, realizando el trabajo no solo de ella si no en ocasiones de sus compañeros, recibiendo un salario miserable, siendo acosada y abusada verbal y sexualmente por sus superiores dentro de la fabrica. Esta violencia no termina una vez que llega a casa si no que continúa allí, donde se ve limitada a ser una madre silenciosa y obediente, su opinión se encuentra coartada. Maude y otros personajes dentro de la película representan la realidad actual de muchas personas.
En esta producción se muestra como las mujeres han marchado por sus derechos durante mucho tiempo, sin embargo empiezan a desesperar cuando las promesas que el gobierno les realiza empiezan a ser rotas una y otra vez, humillándolas, entonces comienzan a movilizarse, mostrando que la sociedad solo responde cuando se encuentran sacudidos por actos de violencia, para ello Maude se fundamenta planteando que “quemamos cosas, rompemos ventanas porque la violencia es lo único a lo que los hombres escuchan, porque nos han golpeado y nos han abandonado y ya no nos queda nada” en esta frase el personaje manifiesta que los oídos sordos de la prensa, la sociedad y el gobierno son los que usualmente hacen que se lleven a cabo actos cargados de violencia, en pos de ser escuchados, de generar un impacto. El personaje de Violet Miller tiene otra de las frases célebres de la película cuando se queja “¿quieres que respetemos las leyes? haz leyes respetables” tanto en ese momento como en la actualidad hay leyes que piden a gritos ser respetadas y de no ser así, el castigo es inminente pero a caso ¿son esas leyes dignas de ser respetadas? hay que destacar que esta película es una representación de los derechos coartados de las mujeres en el Reino Unido, hace mucho tiempo, sin embargo si buscamos en la actualidad no demoraremos en encontrar un sinfín de leyes que violan los derechos no solo de las mujeres, si no de los seres humanos.
Emmeline Pankhurst, la líder intelectual de los movimientos sufragistas en el Reino Unido, interpretada por la magnifica Meryl Streep tiene una de las lineas más ricas en la película;
“Por 50 años, hemos marchado pacíficamente para lograr el voto para las mujeres. Hemos sido ridiculizadas e ignoradas. Estamos luchando por un tiempo en el que cada niña pequeña que nazca en el mundo, tenga las mismas oportunidades que su hermano. Nunca subestimen el poder que tenemos las mujeres para definir nuestro propio destino. No queremos romper las leyes. Queremos hacer las leyes. Sean militantes, cada una de ustedes, en la forma que puedan. Las que puedan romper ventanas, rómpanlas. No nos han dejado otra opción que desafiar al gobierno. Si debemos ir a prisión para obtener el voto, entonces dejen que sean las ventanas del gobierno y no los cuerpos de las mujeres los que sean rotos. Incito a esta reunión y a todas las mujeres de Gran Bretaña a la rebelión. Prefiero ser una rebelde a una esclava.”
Cuando dijeron que esta película iba a salir, muchas personas renegaron que las películas sobre los derechos de las mujeres ya eran un tópico gastado, al igual que todos los temas relacionados con la desigualdad y las minorías, sin embargo, que estés aburrido de verlo en las producciones de Hollywood no significa que esto sea una cuestión del pasado, que haya que dejar de reflexionar sobre este tema y estar al tanto de lo que sucede en el mundo actual.
Centrémonos un momento en la siguiente noticia: un grupo de mujeres árabes se presentaron a la denominada “Primavera árabe”. Como líderes y agentes del cambio en los levantamientos, asumieron los mismos riesgos que los hombres al exponerse a abusos cometidos por el Estado. Sufrieron hostigamiento, acoso, torturas y malos tratos, como agresiones sexuales y amenazas de violación, relacionados específicamente con su condición de mujeres; un caso muy notorio fueron las “pruebas de virginidad” a las que fueron sometidas algunas manifestantes en Egipto. Leyendo esto parece que estuviéramos hablando de varias escenas muy similares a las de la película Sufragistas, la diferencia es que esta situación se dio en el año 2012 y se ha vuelto a dar en distintos movimientos que se han realizado en la actualidad. En Yemen las mujeres no pueden escoger con quien casarse, algunas incluso son obligadas a contraer matrimonio cuando son menores de edad. En Arabia Saudí las mujeres no pueden viajar, tener trabajos remunerados, no pueden conducir ni recibir educación superior.