Cuando se produce la independencia, ya se venían presentando profundos cambios en el proceso de urbanización en nuestro país, en especial durante la segunda mitad del siglo XVIII. La independencia aceleró el reemplazo de los centros de poder tradicional, en especial por la aprobación de la ley de 25 de junio de 1824, que dispuso la división del país en departamentos, provincias y cantones, y, lo más importante, suprimió el sistema jerárquico de privilegios y estableció la igualdad teórica entre todos los municipios. Todo esto produjo un profundo replanteamiento en las primacías urbanas hasta entonces establecidas, y reconoció las primacías reales, que, en varias regiones a fines de la colonia, ya no coincidían con las formales. Esto fue el origen de la desintegración de los territorios bajo el control de las ciudades tradicionales, y en algunos casos el aparecimiento de nuevos epicentros regionales. Sin embargo, la distribución espacial de la población mantenía, durante la primera mitad del siglo XIX, las tendencias generales que presentó durante la colonia.
1. EL POBLAMIENTO DURANTE LA REPÚBLICA.
Cuando se produce la independencia, ya se venían presentando profundos cambios en el proceso de urbanización en nuestro país, en especial durante la segunda mitad del siglo XVIII. La independencia aceleró el reemplazo de los centros de poder tradicional, en especial por la aprobación de la ley de 25 de junio de 1824, que dispuso la división del país en departamentos, provincias y cantones, y, lo más importante, suprimió el sistema jerárquico de privilegios y estableció la igualdad teórica entre todos los municipios. Todo esto produjo un profundo replanteamiento en las primacías urbanas hasta entonces establecidas, y reconoció las primacías reales, que, en varias regiones a fines de la colonia, ya no coincidían con las formales. Esto fue el origen de la desintegración de los territorios bajo el control de las ciudades tradicionales, y en algunos casos el aparecimiento de nuevos epicentros regionales. Sin embargo, la distribución espacial de la población mantenía, durante la primera mitad del siglo XIX, las tendencias generales que presentó durante la colonia.