edalfu LA SOCIEDAD MEDIEVAL---------La sociedad medieval estaba organizada en base a un sistema feudal (entrega de bienes a cambio de servicios). La persona con potestad para otorgar tierras era el Rey y los nobles, obispos, etc., a cambio le ofrecían su ayuda con soldados en tiempos de guerra. Estos nobles, generalmente los más importante, juraban fidelidad al Rey, en un acto llamado homenaje, en el cual el noble se arrodillaba ante el Rey, y a raíz del cual se convertía en vasallo (servidor del Rey). Estos a su vez repartían las tierras entre otros nobles más inferiores o caballeros, que se convertían en vasallos suyos.En el escalón más bajo se encontraban los campesinos que trabajaban la tierra y estaban vinculados a ella (siervos de la gleba) con pocos derechos, escasa propiedad y ningún vasallo. Según las leyes medievales, un campesino no era dueño de sí mismo. Todo cuanto poseís, incluida la comida, pertenecía al señor del feudo. Estaban obligados a trabajar para su señor. En Gran Bretaña, a ambio de su trabajo, se les concedía una pequeña parcela de tierra para cultivo propio. Les estaba prohibido marcharse del feudo sin permiso. La única forma que tenía un campesino de conseguir su libertad era ahorrar lo suficiente para poder comprarse un lote de tierras o casarse con una persona libre. La labranza y la cría del ganado era un trabajo que absorvía toda la jornada. El 90% de la población vivía del campo y trabajaba la tierra. En Gran Bretaña existían los manors, que estaban formados por una aldea, la casa señorial o el castillo del señor, una iglesia y las tierras circundantes. El que gobernaba la comunidad era el manor, y éste se encargaba de nombrar a personas que se encargaran de velar porque los aldeanos cumplieran con sus obligaciones. El señor también ejercía de juez y tenía el poder de multar a quienes quebrantaban las leyes establecidas. Los hogares medievales no tenían nada que ver con lo que conocemos hoy. El campesino pasaba la mayor parte de la jornada fuera de casa. Las casas tenían muchas corrientes de aire y escasa luz. Las ventanas no tenían cristales. Para alumbrarse, pelaban un junco y lo mojaban en manteca, y eso ardía como una vela. Los suelos de tierra se solían desgastar a fuerza de barrerlos. La vida doméstica era muy habitual. Las familias comían, dormían y pasaban su tiempo libre juntas.