Parecida percepción de ese espacio de trabajo es descrita con belleza fotográfica por Aquiles Certad, en 1946: Cerros, o mejor montañas de libros, revistas, folletos y periódicos llegados desde todos los rincones de América, llenan la pequeña habitación desde la cual el ilustre hijo de Costa Rica ha visto nacer, crecer y desarrollarse a su dilecto hijo espiritual, el Repertorio Americano... Una foto dedicada por Waldo Frank a “ mi ilustre amigo, el querido profesor García Monge , un cuadro de madera al relieve de Cortazar, representando una conocida escena del Quijote, fotos de Rodó, de Darío, de Bello, de Montalvo, de Acosta, decoran las paredes de la sencilla habitación en donde hemos encontrado refugio espiritual tantos americanos ansiosos de vivir horas especiales, lejos de la vulgaridad diaria de la vida. Allí vive don Joaquín, apartado de toda actividad política, humilde como un hijo del pueblo y heroico como un romano, ya que para editar su revista ha tenido que librar verdaderas batallas con dueños de imprenta y lo peor, contra la hostilidad de algunos ignorantes y egoístas que lo han querido silenciar el tambor sobre el cual don Joaquín da en América Latina el toque de alerta por la unión espiritual de sus hijos (156,157)
oye no se s t sirva ero por lo menos unnn dato as ok
No se si esto te sirva viene tmb lo de su obra n.n
http://gumilla.org/biblioteca/bases/biblo/texto/SIC194360_540-542.pdf
una pregunta estas segura de que es el venezolano (teatro) o acaso es Auiles cerdan ?
Parecida percepción de ese espacio de trabajo es descrita con belleza fotográfica por
Aquiles Certad, en 1946:
Cerros, o mejor montañas de libros, revistas, folletos y periódicos
llegados desde todos los rincones de América, llenan la pequeña
habitación desde la cual el ilustre hijo de Costa Rica ha visto nacer,
crecer y desarrollarse a su dilecto hijo espiritual, el Repertorio
Americano... Una foto dedicada por Waldo Frank a “ mi ilustre amigo,
el querido profesor García Monge , un cuadro de madera al relieve de
Cortazar, representando una conocida escena del Quijote, fotos de
Rodó, de Darío, de Bello, de Montalvo, de Acosta, decoran las paredes
de la sencilla habitación en donde hemos encontrado refugio espiritual
tantos americanos ansiosos de vivir horas especiales, lejos de la
vulgaridad diaria de la vida. Allí vive don Joaquín, apartado de toda
actividad política, humilde como un hijo del pueblo y heroico como un
romano, ya que para editar su revista ha tenido que librar verdaderas
batallas con dueños de imprenta y lo peor, contra la hostilidad de
algunos ignorantes y egoístas que lo han querido silenciar el tambor
sobre el cual don Joaquín da en América Latina el toque de alerta por la
unión espiritual de sus hijos (156,157)
oye no se s t sirva ero por lo menos unnn dato as ok