Respuesta: Por lo general, las bacterias son unos organismos bastante sencillos. Su tamaño, microscópico como hemos dicho que es, alcanza aproximadamente entre 0,5 y 5 nanómetros de longitud. Al pertenecer tradicionalmente al reino monera y más concretamente a los organismos procariotas, poseen, como es lógico, sus características.
Sí tienen un citoplasma que posee pequeñas fibras circulares de ADN que coexisten con la más grande, la que hay en el nucleoide. También tiene vacuolas, donde se guardan sustancias de reserva y ribosomas (aquí es donde actúan gran parte de los antibióticos usados en medicina). Ese citoplasma está formado por una alta proporción de agua, un 85 %.
El citoplasma de las bacterias está rodeado de una membrana. Algunas bacterias tienen incluso dos membranas, rodeando esta segunda la pared celular.
Monotricas: cuando sólo hay un flagelo en uno de los extremos, o en los dos.
Logotricas: cuando hay varios flagelos en uno de los extremos, o en los dos.
Peritricas: cuando los hay por toda la superficie.
– Fimbrias o pili. Son como pelos y sólo se ven a través de un microscopio electrónico. Son las responsables de que las bacterias puedan adherirse o pegarse a su huésped.
– Esporas. Son unas estructuras que se encuentran sólo en algunas especies bacterianas. Sirven para que la bacteria pueda sobrevivir en condiciones extremas que normalmente las destruiría.
REPRODUCCION
Las bacterias se alimentan y crecen. Cuando llegan a un tamaño adecuado para su reproducción, se dividen. Es decir, se multiplican, utilizando para ello una fisión binaria, que es una forma de reproducción asexual.
También recibe el nombre de bipartición. Cuando una bacteria madre se divide, se forman dos células hijas exactamente iguales entre sí e iguales a la bacteria madre. Su dotación de ADN es idéntica, aunque bien es verdad que pueden existir mutaciones genéticas que creen bacterias diferentes a la bacteria madre.
Cuando la bacteria madre alcanza el tamaño óptimo y duplica su ADN, se encuentra en el momento adecuado para dividirse en dos bacterias y dotará a cada una de ellas de una copia del ADN duplicado.
Esto es lo que sucede habitualmente. Pero también es necesario destacar que a veces se produce una reproducción sexual, que se llama parasexualidad bacteriana. En estos casos, la bacteria donante intercambia a través de los pili, una pequeña cantidad de ADN.
Respuesta: Por lo general, las bacterias son unos organismos bastante sencillos. Su tamaño, microscópico como hemos dicho que es, alcanza aproximadamente entre 0,5 y 5 nanómetros de longitud. Al pertenecer tradicionalmente al reino monera y más concretamente a los organismos procariotas, poseen, como es lógico, sus características.
Sí tienen un citoplasma que posee pequeñas fibras circulares de ADN que coexisten con la más grande, la que hay en el nucleoide. También tiene vacuolas, donde se guardan sustancias de reserva y ribosomas (aquí es donde actúan gran parte de los antibióticos usados en medicina). Ese citoplasma está formado por una alta proporción de agua, un 85 %.
El citoplasma de las bacterias está rodeado de una membrana. Algunas bacterias tienen incluso dos membranas, rodeando esta segunda la pared celular.
Monotricas: cuando sólo hay un flagelo en uno de los extremos, o en los dos.
Logotricas: cuando hay varios flagelos en uno de los extremos, o en los dos.
Peritricas: cuando los hay por toda la superficie.
– Fimbrias o pili. Son como pelos y sólo se ven a través de un microscopio electrónico. Son las responsables de que las bacterias puedan adherirse o pegarse a su huésped.
– Esporas. Son unas estructuras que se encuentran sólo en algunas especies bacterianas. Sirven para que la bacteria pueda sobrevivir en condiciones extremas que normalmente las destruiría.
REPRODUCCION
Las bacterias se alimentan y crecen. Cuando llegan a un tamaño adecuado para su reproducción, se dividen. Es decir, se multiplican, utilizando para ello una fisión binaria, que es una forma de reproducción asexual.
También recibe el nombre de bipartición. Cuando una bacteria madre se divide, se forman dos células hijas exactamente iguales entre sí e iguales a la bacteria madre. Su dotación de ADN es idéntica, aunque bien es verdad que pueden existir mutaciones genéticas que creen bacterias diferentes a la bacteria madre.
Cuando la bacteria madre alcanza el tamaño óptimo y duplica su ADN, se encuentra en el momento adecuado para dividirse en dos bacterias y dotará a cada una de ellas de una copia del ADN duplicado.
Esto es lo que sucede habitualmente. Pero también es necesario destacar que a veces se produce una reproducción sexual, que se llama parasexualidad bacteriana. En estos casos, la bacteria donante intercambia a través de los pili, una pequeña cantidad de ADN.