A los primeros filósofos de Grecia se les suele llamar «filósofos de la naturaleza» porque, ante todo, se interesaban por la naturaleza y por sus procesos. Ya nos hemos preguntado de dónde procedemos. Muchas personas hoy en día se imaginan más o menos que algo habrá surgido, en algún memento, de la nada. Esta idea no era tan corriente entre los griegos. Por alguna razón daban por sentado que ese «algo» había existido siempre. Vemos, pues, que la gran pregunta no era cómo todo pudo surgir de la nada. Por tanto la comunidad griega de sabios se preguntaban por:
A los primeros filósofos de Grecia se les suele llamar “filósofos de la naturaleza” porque, ante todo, se interesaban por la naturaleza y por sus procesos; es la Filosofía quien se encarga de darnos a conocer lo que nos rodea de una manera diferente a como todos la vemos.
“Filosofar es pensar en el mundo y pensarse en él-nos dice Sergio Sinay- como parte del mismo y de sus fenómenos. Es pensarse entre otros, con otros. Es asombrarse de ser parte de un misterio y es responder a ese asombro haciendo de la propia vida una respuesta a las preguntas que se nos abren cuando vivimos despiertos.”
Los primeros pensadores griegos tenían en común la creencia de que existía una materia primaria, que era el origen de todos los cambios. De esta manera, la filosofía se independizó de la religión.
Podemos decir que los “filósofos de la naturaleza” dieron los primeros pasos hacia una manera científica de pensar, desencadenando todas las ciencias naturales posteriores.
El primero del que oímos hablar es Tales, de la colonia de Mileto, en Asia Menor quien opinaba que el agua es el origen, principio o arché (arjé) de todas las cosas, es la fuerza vital.
Su teoría contribuiría a la elección del agua como sustancia primordial, capaz de transformarse en los diferentes estados: líquido, gaseoso y sólido, como dedujo al observar la transformación del fluido en mármol dentro de las cavernas.
Respuesta:
A los primeros filósofos de Grecia se les suele llamar “filósofos de la naturaleza” porque, ante todo, se interesaban por la naturaleza y por sus procesos; es la Filosofía quien se encarga de darnos a conocer lo que nos rodea de una manera diferente a como todos la vemos.
“Filosofar es pensar en el mundo y pensarse en él-nos dice Sergio Sinay- como parte del mismo y de sus fenómenos. Es pensarse entre otros, con otros. Es asombrarse de ser parte de un misterio y es responder a ese asombro haciendo de la propia vida una respuesta a las preguntas que se nos abren cuando vivimos despiertos.”
Los primeros pensadores griegos tenían en común la creencia de que existía una materia primaria, que era el origen de todos los cambios. De esta manera, la filosofía se independizó de la religión.
Podemos decir que los “filósofos de la naturaleza” dieron los primeros pasos hacia una manera científica de pensar, desencadenando todas las ciencias naturales posteriores.
El primero del que oímos hablar es Tales, de la colonia de Mileto, en Asia Menor quien opinaba que el agua es el origen, principio o arché (arjé) de todas las cosas, es la fuerza vital.
Su teoría contribuiría a la elección del agua como sustancia primordial, capaz de transformarse en los diferentes estados: líquido, gaseoso y sólido, como dedujo al observar la transformación del fluido en mármol dentro de las cavernas.
Explicación: